Desde el Movimiento Femenino por la Igualdad Real queremos manifestar nuestra repulsa por las declaraciones vertidas por la Sra. GLORIA POYATOS, presidenta de la Asociación de Mujeres Juezas de España para el periódico El mundo, advirtiendo que la resolución judicial en el caso de la manada, esto es, el ultimo auto que los deja en libertad, “coloca a las mujeres en una situación de desprotección y evidencia la brecha entre la justicia y la realidad social”.
Este movimiento compuesto por mujeres no sale de su indignación ante sus palabras. ¿Que la actitud de estos chavales es indeseable y no puede ser apoyada por nadie? Por supuesto. Y ¿que el comportamiento de la víctima deja mucho que desear? También.
No vamos a entrar, aunque podríamos, porque justo la persona que suscribe este escrito no solo se ha leído la sentencia varias veces, sino también el auto que los deja en libertad, en los entresijos del caso de la Manada, porque para eso están los jueces, que de manera imparcial e independiente deben adoptar sus resoluciones una vez analizada cada una de las pruebas, dejando a las partes los recursos que proporciona nuestro sistema en caso de desacuerdo con esas resoluciones.
Pero de ahí a que gente con la posición de usted cuestione una resolución judicial porque, según mantiene, no esta dictada desde una perspectiva de género, es escalofriante.
No puede negar que el caso ha tenido una repercusión sin igual porque a determinados partidos políticos así como a muchas Asociaciones, agradecidas por su estomago lleno, les ha interesado. Han tirado a la gente a la calle a su antojo, teniendo preparadas ya manifestaciones incluso antes de que se dictara sentencia.
Esto ha hecho que si bien cuando sale todo este caso la gente muestre su repulsa, luego, con el trato del caso por los medios de comunicación, con las pruebas que se han ido conociendo, parte de la población haya salido en defensa de estas personas, por lo injusta de la situación, sin entrar en valoraciones morales de si está bien o no lo que hicieron esas 6 personas fruto de una noche de alcohol, drogas y desenfreno.
¿Como se permite que se den todos los datos de estos chicos, incluido sus domicilios donde viven sus familias que en nada tienen que ver con lo que ocurrió ese día? ¿Cómo se permite que aun sin ser condenados, salgan sus caras día y noche en todas las televisiones, que se cuelguen muñecos ahorcados de un puente en Pamplona y que se les trate como culpables conculcándose la presunción de inocencia que les ampara? ¿esto no es incitar al odio y alentar a la jauría que actúa sin medir las consecuencias?
¿ A qué igualdad se refiere usted como fin de la justicia? Con la actitud de gente como usted, es por lo que se les ha considerado a estos chicos como víctimas. Victimas de un sistema podrido, donde la justicia brilla por su ausencia. Donde cuanto más gritas más razón tienes. Donde se lincha públicamente a los jueces intervinientes, sin que nadie haga nada. Donde la mujer aparece como un ser desvalido y victima de 5 hombres, hasta que las personas de bien tenemos acceso a parte de las pruebas, a la sentencia y a ese voto particular que de manera pormenorizada sale al paso de todos los puntos a esclarecer en una resolución judicial y ya no hay manipulación que valga.
El mensaje que usted envía nos hace pensar que todo esta perdido en cuanto a la Justicia. Como bien dice usted, la discriminación de género es una cuestión de derechos humanos y es lo que usted viene a hacer en sus resoluciones, DISCRIMINAR, teniendo en cuenta sus ideas vertidas a El Mundo. La perspectiva de genero en las resoluciones judiciales no tiene cabida, bueno por lo menos de momento, hasta que gente como usted presione hasta la saciedad reformas legales.
Señora ha quedado claro que la misma victima declaro que no hubo violencia, no una vez, sino varias veces, DEJE DE MANIPULARNOS. No es violación, nunca lo fue, y aun esta por ver que fuera ni abuso.
De esto último os habéis encargado usted y gente como usted, que alienta al odio, a la revuelta. Tratando de manipular la realidad. Gente que ni se ha leído la sentencia gritando y defendiendo lo indefendible.
Nosotras, mujeres, madres, abuelas, quizás diríamos que no nos gustaría que nuestros hijos tuvieran ese comportamiento mezquino con ninguna mujer, y nos avergonzaríamos, pero tenga claro que igual vergüenza tendríamos de una hija como esa. Y no, no tenemos miedo de que nos tachen de lo que quieran.
¿ Por qué no habláis y condenáis a la manada de Alicante acusados de participar en una violación múltiple a una joven de 19 años? ¿por qué son inmigrantes? ¿no tiene la misma categoría la victima de este delito para ser digna de la protección de usted y de las suyas?
Nos avergüenza saber que si las mujeres quieren llegar a los puestos mas altos sea para utilizarlo como usted lo hace Sra. Poyatos, desde el odio al genero masculino. No se usted, pero tenemos padres, hijos, hermanos, amigos, y juntos lucharemos para que no puedan ganar terrero y perdamos la libertad y los derechos que hasta ahora hemos conseguido todos juntos.
¡¡Este mensaje va para usted Sra. Poyatos, a nosotras no nos van a callar!!
