Francisco Núñez apoya que se eleve a 600 hm3 la reserva en el Tajo, lo cual significaría el cierre del acueducto; López Miras le contesta que hay que cumplir la ley

 

El nuevo líder del PP de Castilla-La Mancha, Francisco Núñez, que el domingo tomó el relevo de María Dolores de Cospedal, se ha estrenado en el cargo apoyando que se eleve a 600 hectómetros cúbicos el umbral mínimo no trasvasable desde la cabecera del Tajo, lo cual significaría en la práctica la ‘muerte’ del acueducto, ya que apenas habría excedentes para trasvasar al Segura si se toma como referencia la media de los últimos años.

Nuñez hizo este pronunciamiento horas después de asumir el cargo en el congreso de los populares que se celebró en Albacete, donde se dio un abrazo con el presidente de la Región de Murcia, Fernando López Miras, en presencia de Pablo Casado y María Dolores de Cospedal. El nuevo presidente del PP de la comunidad vecina declaró a Radio Castilla-La Mancha que vería «con buenos ojos» elevar a 600 hectómetros la lámina mínima de agua en los embalses de Entrepeñas y Buendía, por debajo de la cual no se podría trasvasar al Levante. Añadió que es partidario de «todo lo que sea mejorar el nivel mínimo». «Cuanto más, mejor». Explicó que la presidenta del PP de Guadalajara, Ana Guarinos, asistirá a la reunión con el Gobierno de Emiliano García-Page para abordar el Pacto Regional por el Agua en el que trabaja el Ejecutivo autonómico. Apostó por abordar el tema a nivel nacional, y siempre quitando «carga política» a la polémica en detrimento de la «carga técnica», informa EP.

«Sentarse a hablar»

El presidente López Miras le contestó ayer señalando que la ley del Memorándum «es muy clara, y lo que todos debemos hacer es cumplir la ley». «Estoy convencido de que si Francisco Núñez y yo nos sentamos a hablar de agua, llegaríamos a un acuerdo que satisfaga las necesidades de las dos cuencas. Pero la solución pasa por abordar el problema como lo que es, una cuestión de Estado. Y el Estado debe escuchar a todas las comunidades autónomas. Pedro Sánchez está tardando en convocarnos para abordar el problema del agua en España y que, entre todos, seamos capaces de llegar a un acuerdo común», añadió López Miras. «La disposición del Gobierno de la Región de Murcia es máxima. Ya casi teníamos ese acuerdo cerrado, pero Pedro Sánchez ha optado por dilapidarlo y olvidarse».

La reserva no trasvasable de la cabecera del Tajo está fijada ahora en los 400 hectómetros, a raíz de la ley del Memorándum que promovieron el PP y Cospedal cuando estuvo al frente del Gobierno de Castilla-La Mancha. Los regantes la aceptaron, convencidos de que se blindaba por ley el Trasvase y de que obtendrían otras compensaciones, como las cesiones de derechos, aunque se aplican de forma restrictiva.

Con las elecciones autonómicas a ocho meses vista, el PP y el PSOE de Castilla-La Mancha han entrado en una dinámica por ver qué partido defiende más agua para su comunidad «en cantidad y calidad», poniendo el foco en el aumento de las reservas en la cabecera del Tajo para tratar de inutilizar el Trasvase.

 
 
 
FUENTE: LAVERDAD