Más País, matriz de Más Madrid, aspira a convertirse en el «referente verde» en España. El repunte electoral de Mónica García, que se acerca al PSOE en las encuestas, permite a los miembros de su formación hablar de un proyecto que en los próximos dos o tres años puede lidiar con los socialistas para el espacio de la izquierda de gobierno. Todas las miradas están puestas en Alemania, y concretamente en el Partido Verde, que es un aliado de Más País. Los dirigentes de esta formación estudian el modelo de «renovación moderada» que ha llevado a los ecologistas alemanes a convertirse en primera fuerza nacional en los sondeos.

El día que Isabel Díaz Ayuso convocó el adelanto electoral en la Comunidad de Madrid para el 4 de mayo, muchos dirigentes de Más Madrid vivieron las “horas más tensas” de su carrera política. En los meses anteriores, la dirección había dado la orden de no alentar posibles adelantos electorales por el miedo a perder la mitad de sus escaños. Dirigentes como Tania Sánchez estaban trabajando para reforzar Más País en otros territorios y el adelanto electoral, y después la oferta de Pablo Iglesias de sumar fuerzas en una lista única, obligó al partido de Íñigo Errejón a tomar decisiones valientes.

La primera fue desmarcarse en menos de 24 horas de la iniciativa de Iglesias. La cúpula de la formación, de la que forman parte excompañeras de Iglesias como Tania Sánchez y Rita Maestre entendieron que la oferta era una propuesta envenenada. La rechazaron rápidamente y emprendieron una feroz batalla electoral para desmarcarse de Ayuso y centrarse en la promoción de su candidata.

 

Atraer a votantes de centro

La elección ha sido exitosa. Más Madrid no solamente ha frenado la sangría demoscópica (Iglesias, en cambio, se ha estancado), sino que aspira ahora a acercarse al PSOE. Algunos incluso hablan de sorpasso, aunque admiten que “tal vez sea un sueño”. De lo que sí están convencidos en Más Madrid es de que las elecciones del 4-M tienen una connotación nacional. De ello, están seguros también miembros del Gobierno socialista de Pedro Sánchez.

Los promotores del partido errejonista están convencidos de que tienen por delante un espacio político al alza. Y señalan al caso alemán para hablar de «ola verde» que también se instalará en España, y en otros países comunitarios. La clave del modelo Grünenes que la nueva lideresa de la formación (que actúa como coalición, al igual que quiere hacer Errejón con otras fuerzas regionalistas), Annalena Baerbock, propone combinar términos como “justicia ambiental, social y ecologismo” para atraer votos tanto a la izquierda como al centro. Sobre todo en los entornos urbanos y en búsqueda de votantes jóvenes.

De hecho, Errejón y los suyos creen poder atraer incluso a exvotantes de Ciudadanos después del previsible colapso del partido en Madrid. El diputado de Más País se ha desmarcado de las amenazas recibidas por Iglesias y hasta ha cuestionado la candidatura de la socialista Reyes Maroto.

Hace tan solo cuatro días, los sondeos dibujaron un histórico sorpasso a la CDU de Angela Merkel. A pocos meses de las elecciones generales del próximo septiembre, Baerbock está logrando que el partido repunte con fuerza en los sondeos, hasta un 28% en intención de voto. Los analistas alemanes hablan de cambio de rumbo histórico. De convertirse en primera fuerza, los Verdes podrían hasta ocupar la Cancillería. Hasta ahora los verdes han alcanzado el ministerio de Exteriores y la Vicecancillería durante el gobierno de Schroeder (SPD). En los sondeos, la CDU cosecha entre un 22% y un 27% de preferencias (dependiendo del centro demoscópico), y el SPD solamente un 13%.

Respuesta de Iglesias

La importancia del “espacio verde” en el tablero político nacional también fue analizado por la cúpula de Unidas Podemos. Como desveló este diario, el equipo de Pablo Iglesias estaba a punto de lanzar una plataforma que lidiase contra Más País en ese ámbito y que fuese liderada por el diputado Juantxo Uralde, que abandonó Equo después de que la corriente verde se decantara por Errejón en 2019.

El adelanto electoral madrileño, sin embargo, ha frenado de momento los planes de Iglesias. El candidato a la Comunidad de Madrid suele estar acompañado por Uralde en sus actos de campaña. Aun así, prefirió enfocar su campaña en el eje “democracia o fascismo”, dejando a Más Madrid terreno libre en el segmento de la regeneración y ecologismo.

Los afines de Errejón sostienen que «no hay prisa». «Pico y pala», ironizan algunos para recordar el eslogan de Esperanza Aguirre. Su objetivo es consolidarse en Madrid y luego entrar en otros parlamentos regionales y plenos municipales, como ya desveló este diario. Más allá de las elecciones madrileñas, el partido turquesa prepara las autonómicas y municipales de 2023, y sobre todo analiza la situación en Andalucía donde no descarta otro adelanto electoral en el caso de un triunfo de Díaz Ayuso. Ya hay contactos con Teresa Rodríguez para construir algo parecido a una coalición con siglas autónomas (oficialmente hablan de “candidaturas asociadas”).

La apuesta verde de Errejón tiene, por otro lado, una deriva en la conquista de cuadros de Podemos. No cabe duda que un éxito electoral de Más Madrid daría el pistoletazo de salida a esa OPA hostil que Tania Sánchez quiere ejecutar tal y como hizo con Izquierda Unidas entre 2014 y 2015. «Las prisas no son buenas», ha repetido recientemente Errejón en una entrevista en Europa Press, y habla de «construir poco a poco» en cada territorio el nuevo partido verde de España. Al igual que Felipe González en los setenta, los errejonistas quieren volver a emular modelos organizativos e ideológicos que se han afianzado en Alemania.

 
 

FUENTE: VOZPOPULI