Carles Puigdemont y otros miembros fugados de su gabinete han puesto en marcha el “Consell de la República”, que pretenden convertir en una especie de “gobierno catalán en el exilio” para movilizar de nuevo a sus bases y atacar la imagen de España en el extranjero. Con mayor o menor entusiasmo lo apoyan partidos y entidades independentistas, aunque una de estas entidades propone un pequeño (pero significativo) cambio en el nombre. La Assemblea Nacional Catalana (ANC) va a pedir que pase a denominarse “Consell de la República”, y no “per la República”. De hecho, “Consell de la República” es el nombre que se anunció cuando JxCAT, ERC y la CUP pactaron su nueva hoja de ruta. La preposición “de” da idea de que se trata de un organismo de una república ya existente, propuesta que apoya el independentismo más radical para poner en valor que la república está en marcha, ya que fue proclamada aunque no se haya materializado. Al revés, “per la República” da a entender que se trabaja “para” alcanzar una república que todavía no es realidad. Un matiz, representado por una preposición, entre dos posturas más o menos realistas del independentismo catalán.

 
 

FUENTE: ELCONFIDENCIALDIGITAL