Cayetana Álvarez de Toledo es una firme defensora de la línea de Pablo Casado como presidente del Partido Popular. Tenía peor opinión de Mariano Rajoy. Antes de las elecciones de 2015 rechazó volver a ir en las listas del PP, y explicó que lo hacía porque “no encuentro argumentos suficientes para defender la gestión del Gobierno ni para pensar que elpresidente Rajoy actuaría de forma distinta a como lo ha hecho hasta ahora”, sobre todo por haber abdicado de “su responsabilidad constitucional de hacer cumplir la ley en Cataluña” al permitir el referéndum ilegal del 9-N.
Con esos antecedentes tan críticos, llama la atención la referencia que la portavoz popular hizo de Rajoy, hace unos días, en una conferencia en los cursos de verano de la Universidad Complutense de Madrid. Defendió el reformismo frente a la ruptura, como vía para mejorar España. “El reformismo fue Felipe González y fue José María Aznar”, afirmó Álvarez de Toledo, que a continuación -ante muchos dirigentes y diputados del PP- añadió “y fue Mariano Rajoy”. Entre Aznar y Rajoy, Zapatero inauguró “una nueva era de ruptura en España”. Al incluir a Rajoy entre los presidentes “reformistas” se puede considerar toda una alabanza al anterior líder del PP.