Apenas ha durado dos años como primer edil de Valdemoro Guilermo Gross. Tras varias polémicas, una alianza de izquierdas liderada por el PSOE va a desalojarle del cargo.
Mientras Ciudadanos vive días de vino y rosas en la política nacional -decisivo para la gobernabilidad y al alza en todas las encuestas- a Albert Rivera se le acumulan los problemas en los ámbitos autonómico y municipal.
Si la pasada semana se produjo una auténtica batalla campal en el grupo parlamentario de C’s en la Cortes Valencianas, con la deserción de cuatro de sus 13 diputados, Rivera recibe ahora un serio revés en la Comunidad de Madrid. Y es que el partido naranja está a punto de perder la alcaldía de Valdemoro, la segunda ciudad más importante de las que gobierna, por detrás de la malagueña Mijas.
En la localidad natal del exvicepresidente madrileño Francisco González y epicentro de la Operación Púnica, el naranja Guillermo Gross gobernaba esta ciudad de casi 80.000 habitantes en minoría, con seis concejales de 25.
Pero, tras varias polémicas, el PSOE ha impulsado una moción de censura a la que ha atraído a la marca de Podemos, Ganemos Valdemoro, a Izquierda Unida y a los independientes de Proyecto TUD.
Dada la aritmética del consistorio, en el debate del próximo 14 de julio, C’s verá como le arrebatan una de sus joyas de la corona.
Gross ya ha adelantado que la unión a cuatro traerá más inestabilidad pero la oposición le acusa de «soberbia y ocultismo».