Carles Puigdemont, president destituido de la Generalitat, no está en Catalunya ni en España. Se encuentra en Bélgica junto a otros miembros del Govern cesados el viernes en virtud del artículo 155 de la Constitución, según ha podido conocer La Vanguardia. Los exconsellers que acompañan al exdirigente catalán serían Joaquim Forn (PDeCAT), Meritxell Borràs (PDeCAT), Antoni Comín (independiente), Dolors Bassa (ERC) y Meritxell Serret (ERC).

Su salida de España se conoce el mismo día en que el Fiscal General del EstadoJosé Manuel Maza, ha presentado sendas querellas por rebelión, sedición, malversación y ortos delitos contra todo el Govern y la Mesa del Parlament, delitos que conllevan hasta 30 años de cárcel. Puigdemont y los miembros de su Govern podrían realizar una comparecencia conjunta entre esta tarde y mañana.

El abogado de Puigdemont no asegura la comparecencia del expresident ante la Audiencia Nacional si se admite a trámite la querella de la Fiscalía

Fuentes del Ministerio de Interior han confirmado la presencia del expresident en Bruselas, pero han asegurado que no les “preocupa” ese viaje porque, lo que les interesaba “más hoy” es que no acudiera al Palau de la Generalitat tras haber sido cesado.

La presencia de Puigemont en Bélgica junto a estos cinco exconsellers contrasta con la permanencia del exvicepresidente del Govern, Oriol Junqueras, que este lunes ha acudido a la reunión de la dirección de ERC; y con el desafío del conseller de Territori, Josep Rull, que hacía acto de presencia en su despacho en la conselleria y daba cuenta de ello en las redes sociales.

La visita del expresident a Bruselas está marcada por la querella anunciada por el fiscal general del Estado esta mañana, en la que acusa a Puigdemont y todo su Govern de sedición, rebelión, malversación y delitos conexos, y la oferta de un alto dirigente del gobierno belga lanzada este domingo para dar asilo político al expresident.

Precisamente, la posibilidad de que el expresident y los exconsellers que le acompañan tengan previsto reclamar asilo político sería de momento una posibilidad a la que algunos ya dan credibilidad. Aunque ni desde Bruselas ni desde el Gobierno lo confirman, el diputado de Junts pel Sí (JxSí) Lluís Llach lo justificaba a través de su cuenta de Twitter al señalar que “el MHP de la República exiliado es una denuncia contra España ante los estamentos europeos, internacionales y nos conserva la dignidad del 1-O”.

Se da la circunstancia de que este domingo secretario de Estado belga de Migración y Asilo, Theo Francken, ofreció asilo político a Puigdemont, lo que provocó una grave crisis en el gobierno belga y obligó al primer ministro, Charles Michel, a desautorizar al responsable de asilo.

 En un comunicado dirigido a la agencia Belga, Michel señaló que el asilo para Puigdemont “no está en absoluto en el orden del día” del Gobierno. “Pido a Theo Francken que no eche leña al fuego”, señaló el primer ministro, quien reiteró, además, su llamamiento al diálogo entre las autoridades españolas y catalanas. El portavoz del PP en el Parlamento Europeo, Esteban González Pons, opinó ayer que Francken incumplió los principios de solidaridad y colaboración de los países en la Unión Europea.

El abogado del expresident, Jaume Alonso Cuevillas, declaraba esta mañana que había tenido la ocasión de comer con Puigdemont este domingo y que pudo notarle “afectado” pero a la vez ”sereno” y “consciente de los riesgos que ha asumido”. Y ante la querella que afronta, el letrado señalaba que sólo él sabía a ciencia cierta si acudiría a declarar tras la citación del juez.

El exjefe del Govern jugaba al despiste a primera hora de la mañana con un breve mensaje en Instagram

El exjefe del Govern jugaba al despiste a primera hora de la mañana con un breve mensaje en Instagram en el que publicaba una imagen del interior del Palau de la Generalitat acompañado de un saludo: “buenos días”.

Desde el PDeCAT, la coordinadora Marta Pascal no ha querido confirmar la presencia del expresident en Bruselas, tampoco desde ERC lo han hecho, pero desde el PP, el número dos del PP, Fernando Martínez Maíllo daba por sentado esta visita al asegurar que el viaje a Bruselas es fruto de la “desesperación” puesto que este lunes no ha podido acudir a su despacho en la sede de la Generalitat.

 

El expresident de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha colgado una imagen en Instagram este lunes por la mañana.
El expresident de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha colgado una imagen en Instagram este lunes por la mañana. (LV)

 

El conseller cesado de Territori i Sostenibilitat, Josep Rull, sí que ha asistido a su Departament, desde donde ha publicado una imagen en las redes sociales haciendo ver que estaba trabajando como cualquier otro día, sin embargo recibía la visita de una pareja de mossos en su despacho y, minutos más tarde, abandonaba el Departament asegurando que seguía trabajando y atendiendo a su agenda del día. Posteriormente, se dirigía a la reunión de la Ejecutiva de su partido, el PDECat.

El videpresidente cesado, Oriol Junqueras, por su parte, no ha hecho acto de presencia por su conselleria, a la que sí han acudido otros altos cargos como el ex número dos Lluís Juncà, y los secretarios de Economía, Pere Aragonès, y de Hacienda, Albert Castellanos. Sólo se ha podido ver a Junqueras cuando ha acudido a la reunión de la dirección de ERC, en la que la formación republicana ha confirmado que concurrirán al 21D.

A estos mensajes les seguía el anuncio, en una breve comparecencia, del fiscal general del Estado, José Manuel Maza, de que presentaría una querella por sedición, rebelión, malversación y delitos conexos “contra los principales responsables políticos de la Generalitat de Catalunya, que con sus decisiones y actos a lo largo de estos dos últimos años han producido una crisis institucional que culminó con la declaración unilateral de independencia realizada, con total desprecio a nuestra Constitución, el pasado 27 de octubre”. En dicha querella, el fiscal abre la puerta a pedir prisión provisional y a reclamar una fianza o embargos por valor de 6.207.450 euros.

Quien sí acataba las resoluciones del artículo 155 era la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, al suspender la reunión de la Mesa de la Cámara catalana de este martes por haber sido “disuelta” por el presidente Rajoy.

Posteriormente, los responsables de los partidos independentistas mayoritarios se reunían en sus respectivas sedes para decidir los próximos pasos a dar. ERC y PDeCAT confirmaban que se presentarían a los comicios del 21D aunque no den legitimidad a la convocatoria. Lo que no dejaban claro de momento es cómo se presentarán a esas elecciones, es decir, si lo harán reeditando la fórmula de Junts pel Sí (JxSí) o no. El hecho de que haya convocada una reunión en el Parlament entre ambos partidos da a entender que sopesan hacerlo así.

Este lunes el representante del Govern ante la UE, con oficina en Bruselas, Amadeu Altafaj, ha acatado el cese y ha reclamado a las instituciones europeas que fomenten el diálogo.
 

 

FUENTE: LAVANGUARDIA