Socialistas e Independientes piden el apoyo de la oposición para ejecutar los presupuestos y ante las “distintas administraciones”. Uno y otro Alcalde lo ponen de manifiesto en varias comparecencias mediáticas e intervenciones plenarias para ganar tiempo ante la perdida de fuelle del “Pacto del Buen Provecho” y el acentuado desinterés político de la ciudadanía en los últimos años – podría haber sido una buena noticia de no ser porque los principales actores de esta farsa política hacen como que no se dan por enterados de la mengua del apoyo popular (apenas 13.000 votantes de un censo de 26.000 en las pasadas elecciones). Se hacen los sordos, pero han bajado el tono.
El “Equipo de Gobierno” arranca el curso político apostando por reforzar la presencia de alcaldes y concejales en los distintos medios, para explicar a toda la ciudadanía, organizaciones y agentes sociales, que el “ordenancista” plan de inversiones aprobado es muy necesario para acometer e impulsar “una recuperación justa” y dejar cuanto antes a un lado las consecuencias sociales y económicas de la crisis sanitaria. Claro está, con la venia de la “logia caciquil”.
En un año que continúa marcado por la pandemia “que va remitiendo pero que no está totalmente superada y que exige aún responsabilidad y cumplimiento de las normas sanitarias”. Socialistas y asociados pretenden reivindicar en todas las instituciones y ante todas las administraciones, independientemente de quién las gobierne, las ayudas e inversiones que Mazarrón precisa. Quieren trabajar para que esas inversiones, si es que llegan, queden recogidas en los Presupuestos para 2022/23; unas cuentas que pronostican van a ser de vital importancia y pueden marcar un antes y un después gracias también a los fondos europeos.
Pero de momento, continúan embarcados en una absurda competición con la oposición, fomentando el ruido mediático y enfangando el debate político, no están aportando nada a la población en ninguno de los ámbitos. En clave regional, los parlamentarios del PSOE carecen de iniciativas municipales que puedan beneficiar y paliar las carencias endémicas que Mazarrón sufre, y su escasa actividad se limita a una oposición destructiva, partidista y sin rumbo. En clave nacional el tema TRASVASE es tabú por aquí, ni que decir sobre trenes de cercanías “idem de idem”, y aunque podría ser el momento para intentarlo al menos, mejor se agarran “al supuesto éxito logrado en la vacunación contra la Covid-19 y la necesidad de continuar avanzando en este proceso”.
En la Asamblea Regional, el “bipartidismo infiel “sigue a lo suyo, continúa perpetrando continuos desplantes a nuestro pueblo en todos los ámbitos, sin detener la condena inversionista y sin ningún proyecto con trazas después de más de 30 años, donde solo caben venganzas, rencores y recortes, especialmente en materia educativa, sanitaria o en infraestructuras. Y en San Esteban, continuamos asistiendo a una gestión partidista y clientelar del Partido Popular con la complicidad de las mitades proindivisas de Cs y Vox, y la inestimable facción púnica socialista, arte y parte con los lobbys de poder en la fallida moción de censura, en los pactos de Gobierno y en la que se avecina por Princesa…¡¡OJO AL DATO!!
POST SCRIPTUM: “No juzguéis cada día por la cosecha obtenida, sino por las semillas plantadas.”
Contemplo, y no exclusivamente en el mundillo de la política local, la proliferación de parásitos tenidos por «gurús de los mandamasillos politicos» por sus celebradas ocurrencias, muchos de ellos de “talla intelectual y en casos incluso politica” que también confirma la condición moral y el nivel de quienes les jalean. Todos y todas convencidos son copias de Fouché a las órdenes de quien admitamos, tampoco está hecho con retales de Napoleón, lista interminable que confirma que «todos estos y estas», una vez subidos a la peana del poder actúan como si en efecto una muy especial paloma hubiera incrustado en sus meninges conocimientos que nadie, probablemente ni ellos ni ellas eran conscientes atesoraban.
Confieso, visualizando sus últimas «carencias» que me corroe la mala uva por la potra que tienen, ello admitiendo ser «chic@s talentos@s» a los que hay que agradecer hayan situado el Salón de Plenod en la condición del “CIRCO” que desde niños todos tenemos troquelado que donde haya un circo, es seguro habrá payasos a los que posiblemente tocó vivir situaciones inesperadas e injustas, posiblemente en su caso por pertenecer a una familia sin pedigrí politico y economía modesta que le situó en el lugar equivocado, hasta que un golpe de suerte muy “merecida» al currarse una rudimentaria formación servil con ayuda del clan benefactor de turno, hizo posible el sueldo de concejal de » Cuenca».
Vivo ejemplo, que al menos en algun caso trocó en la suerte de marionetas (Cenicienta o Arlequín) por méritos propios de la injusticia, incluso corrupción que sigue formando parte de sus vidas y que se manifiesta a diario en nuestro entorno, no exclusivamente en lo que conocemos como casta política, sea la recomendación de un Jerifalte o miembro del Sanedrín refrendado con el de otras personas del mismo entorno social o similar formación, muchach@s en los que pasado cierto tiempo emergerá una posible, incluso probable ineptitud al haber “llegado” con la sola acreditación del apadrinamiento y voz de sus amos.
Los partidos no funcionan en Mazarron, la ciudadanía no se siente representada por ellos ni los ve permeables a sus propuestas. Les acusan de estar obsoletos, de servir a intereses particulares en detrimento del interés general. Se les llena la boca con promesas de regeneración y cambio, pero a la hora de la verdad, sus estructuras y gobierno interno, más propias del feudalismo medieval o de oligarquías del siglo pasado, no responden a las necesidades de la sociedad actual.
Son algunas de las críticas más extendidas de la población y medios libres hacia los partidos políticos.
Normalmente, solemos pensar en la ideología como un conjunto de presupuestos y teorías que nublan nuestra visión y nos impiden ver la realidad tal y como es, entonces, la crítica simplista a la ideología recae en la necesidad de sacarse esos prejuicios de la cabeza para observar los hechos como son. También resultan bastante frecuentes las afirmaciones de que estamos en una era posideológica, pues los lobbys del establismhent han logrado disfrazar las ideologías bajo argumentos como el utilitarismo, y las personas son reducidas a sujetos de deseo de modelos hegemónicos impuestos a través del «hotmoney», la interesada publicidad financiada en medios tradicionales y en las redes sociales. ¿OS SUENA DE ALGO A LO QUE VIVIMOS EN MAZARRON?
El clientelísmo y la corrupción Institucional, la perversa conexión con uno u otro “cártel benefactor”, parece algo del pasado. Y la cruda realidad es que están ahí. El nivel de negocio y violencia en el último quindenio no se puede comparar con otros tiempos, y cada vez son más frecuentes los ajustes de cuentas y la irrupción de sicarios satisfechos por la trama clientelar en la localidad. Es el lamentable resultado de casi cuatro décadas de “bipartidismo infiel” consolidando la Plutocracia impuesta en Mazarrón.