Corazoncitos blancos sobre fondo rojo. La decoración del programa electoral con el que el PSOE concurre a las elecciones del próximo 28 de abril, presentado el miércoles por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, da idea de la cursilería que rezuma el contenido, pero también de las aviesas intenciones del mismo: identificar todo lo bueno de este mundo con Sánchez.
Ese mismo logo que aparece en el programa -un guión vertical inclinado y un corazón blanco- está siendo empleado desde mediados de febrero por los candidatos del partido, incluido Pedro Sánchez, en sus mensajes de campaña en Twitter. El partido ha sustituido el puño y la rosa por elcorazoncito de marras.
El programa del PSOE incluye 110 medidas que el partido se compromete a llevar a cabo si logra imponerse en las elecciones y formar Gobierno. Pero en ningún momento explica cómo se hará, de donde se sacará el dinero para implantarlas.
Difícilmente pueden costearse los gastos sociales propuestos con los pocos impuestos incluidos en el programa
En un momento en el que es evidente la desaceleración económica y en el que negros nubarrones se ciernen sobre Europa -con Alemania dando síntomas de recesión, los chalecos amarillos en Francia, el brexit en Reino Unido y el caos de la política italiana- proponer un elevado gasto en medidas sociales que cualquiera firmaría, es, o un brindis al sol, o una temeridad que será dolorosamente recordada cuando vengan mal dadas.
El programa del PSOE esconde que un buen número de las medidas propuestas ya habían sido antes enunciadas, y que no se han aprovechado las ocasiones en los que ha formado Gobierno para aprobarlas: haremos lo que dijimos que haríamos y que nunca haremos.
«Aprobaremos una Ley de Mecenazgo (…)», dice el punto 19. ¿Por qué no la aprobó el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, o el último de Sánchez?. «Promoveremos la racionalización de los horarios con el fin de mejorar la corresponsabilidad y la conciliación de la vida laboral y familiar (…)», ¿cuántas veces han aludido a este asunto los dirigentes políticos en este siglo?
El programa recoge la promesa de una ley de eutanasia, que en realidad fue la primera que hizo Sánchez cuando llegó al Gobierno
«Aprobaremos una Ley contra el Fraude Fiscal para prevenir y combatir las nuevas formas de evasión, y aumentaremos los activos de la Inspección de Hacienda», recoge el programa en el punto 48. ¿Otro plan para atajar el fraude fiscal? Desde el Plan de Prevención del Fraude del año 2006 se han aprobado cerca de medio millar de medidas preventivas; el pasado mes de enero se publicó el Plan de Control Tributario y Aduanero 2019, con el mismo objetivo de combatir el fraude fiscal.
«Lucharemos contra los paraísos fiscales«, incluye también el programa en el punto 48. ¿Por qué no mejor luchar contra los que se aprovechen de su existencia y dejar a la Unión Europea o a otras institucionales supranacionales encargarse de ello?
«Regularemos la publicidad de los juegos de azar y las apuestas online», dice el punto 60. ¿No podían haberlo hecho ya? Desde hace más de un año el sector del juego en España tiene un borrador de decreto sobre ello. Las empresas de juego online, la mayoría con sede en Gibraltar o Malta, cuentan con menores restricciones de publicidad y controles que las compañías españolas tradicionales de juego.
Sánchez anunció la Autoridad de Protección del Cliente Financiero el pasado mes de noviembre
«Reformaremos el sistema público de pensiones» (punto 61). ¿Cuántas veces han prometido los partidos, no solo el PSOE, la reforma del sistema de pensiones?
«Culminaremos la reforma constitucional para limitar los aforamientos políticos» (punto 87). En este caso, «limitar» no significa suprimir. «Aprobaremos una ley para regular la eutanasia y la muerte digna (…)»; en realidad, la primera medida que anunció Sánchez cuando se hizo con el Gobierno fue esta misma.
«Crearemos la Autoridad de Protección del Cliente Financiero» (punto 103). El pasado mes de noviembre, cuando el Tribunal Supremo se corrigió a sí mismo decidiendo finalmente que el impuesto de la hipoteca lo seguirán pagando los clientes y no la banca, Sánchez aprovechó la ocasión para anunciar la creación de esa figura protectora de los clientes de la banca, pero que no ha podido ver la luz en esta legislatura.
El partido liderado por Sánchez oculta en su programa las barreras presupuestarias y de déficit que hacen inviables muchas de sus propuestas. La única receta que aporta para explicar cómo va a financiar el gasto social anunciado es a través de una subida de impuestos, impuestos que en teoría no afectarán a la mayoría de la población.
El programa del PSOE contempla incrementar «la aportación de las grandes empresas y de los contribuyentes con ingresos más altos»
Así, el PSOE propone incrementar «la aportación de las grandes empresas, y de los contribuyentes de ingresos más altos y con mayores patrimonios» (punto 45). ¿Cuáles son los ingresos más altos, los mayores patrimonios? ¿Cuánto se van a subir los impuestos a las grandes empresas? ¿Y cuáles son las grandes empresas?
De forma difusa el programa incluye otras subidas de impuestos, de esos que parece que sólo afectarán a unos pocos: «Impuestos sobre determinados servicios digitales, impuesto sobre transacciones financieras e impulso a la fiscalidad ambiental». Difícilmente podrá atenderse el gasto social propuesto en el programa electoral del PSOE con los pocos impuestos avanzados.
FUENTE: VOZPOPULI