Las últimas maniobras judiciales del PP para evitar sentarse por primera vez en un banquillo como persona jurídica fracasaron este viernes. El juez Eduardo Muñoz de Baena acordó que la formación sea finalmente juzgada en la causa abierta por el borrado de los ordenadores en los que el extesorero Luis Bárcenas dijo guardar información sobre la caja b del partido. La Fiscalía, que ya había pedido el archivo de la causa, volvió a plantear la exculpación del PP por la doctrina Botín.

 
La exculpación del partido fue planteada por la Fiscalía en la primera jornada del juicio por la destrucción de los discos duros, dedicada íntegra a las cuestiones previas. Tras escuchar al ministerio público, el magistrado anunció que resolvería la cuestión sobre la doctrina Botín —jurisprudencia del Tribunal Supremo que determina que no se puede juzgar a una persona si no acusa la Fiscalía o el perjudicado directo, como ocurre en este caso— cuando dicte sentencia, lo que definitivamente obligará al PP a permanecer en el banquillo junto a los otros tres acusados, todos ellos empleados del partido, hasta el final de la vista. De nada sirvió que el abogado de la formación solicitara al juez que reconsiderase su postura. El magistrado también rechazó anular el auto de apertura de juicio.

FUENTE: ELPAIS