Cierre de filas en Ciudadanos tras el primer intento de asalto del Partido Popular para quedarse con su electorado una vez consumado el fichaje del bufete de Albert Rivera para presentar un recurso ante el Tribunal Constitucional y la entrada de José Manuel Villegas en el patronato de la nueva fundación de los popularesPropósito-.

En el partido de Inés Arrimadas ven un claro intento de la formación de Pablo Casado por fagocitarles mediante una OPA hostil, según reconocen fuentes de la dirección de Cs a Vozpópuli, aunque desde la dirección evitan toda crítica pública a sus antiguos líderes -Rivera y Villegas-.

Sobre estos últimos, las citadas fuentes consideran que, más allá de sus nuevas actividades de índole privado, es el PP el que está mostrando sus cartas con una estrategia de anuncios con la que quiere dar la sensación a dirigentes y votantes naranjas de que Cs se está descapitalizando con la vuelta de estos ‘hijos pródigos’, a pesar de que a Villegas, por ejemplo, siempre se le encuadró en la socialdemocracia.

El equipo de Arrimadas ha encajado los golpes con tranquilidad y sin entrar en el barro. Cuando Rivera dijo este jueves que se alegraba de haber dimitido tras la debacle que sufrió su partido hace un año porque se ha confirmado que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quería pactar con Podemos y los partidos independentistas, en la dirección de Cs se dio la orden de no entrar en una espiral de reacciones y subrayar que el expresidente no había citado directamente al partido que presidió hasta el 10-N. El propio Rivera quiso que sus palabras no se vieran como una crítica hacia Arrimadas.

En Ciudadanos se ve con preocupación la salida de afiliados tras perder a la mitad de la militancia en un año, tal y como desveló Vozpópuli, pero lo achacan a tres factores: los efectos de la debacle del 10-N; la derrota del sector crítico en las primarias de febrero que hizo que muchos de los seguidores de Francisco Igea abandonasen el partido; y, por último, la pandemia del coronavirus que hace que más de un afiliado haya preferido irse con tal de ahorrarse los euros de la cuota en un contexto de crisis económica.

Arrimadas mantiene su giro al centro

Las citadas fuentes no consideran que se haya acentuado la huida de militantes por el giro estratégico de Arrimadas. Es más, subrayan que están volviendo a acercarse al partido naranja simpatizantes que se alejaron el año pasado desengañados con el ‘no es no’ de Rivera y la ‘foto de Colón’ junto a formaciones como el PP y Vox.

Desde la dirección nacional se hace hincapié, además, en que lo que ha hecho ahora Cs es volver al centro político, cuando el año pasado se viró al centro-derecha por decisión de Rivera, y que el fin último es recuperar a una parte importante del electorado que le dio la espalda el 10-N tras los resultados históricos del 28-A.

En los comicios de hace un año, casi un millón de votantes de Ciudadanos se quedó en casa, mientras que otro millón y medio votó a la derecha: 800.000 volvieron al PP y más de 600.000 se fueron a Vox. Solo 200.000 votaron izquierda, básicamente al PSOE. Así que la mano tendida de Arrimadas con el Gobierno busca, en última instancia, recuperar a los abstencionistas y al cuarto de millón de votantes naranjas que optaron por el partido de Sánchez el 10-N.

 
 
FUENTE: VOZPOPULI