«Es una reforma inaceptable«. Así de tajante se ha mostrado este miércoles Izaskun Bilbao, eurodiputada del PNV, después de que una mayoría de sus colegas hayan aprobado una reforma que amenaza con dejar a su grupo,Bildu, Compromís, ERC, PDeCAT y BNG fuera de la Eurocámara. La reforma electoral, impulsada por conservadores y socialistas, abre la puerta a que los países de circuscripción única con más de 35 escaños impongan un umbral mínimo —de entre el 2 y el 5%— para lograr un escaño en el Parlamento Europeo (PE).
La reforma afectará principalmente a Alemania y España, los únicos países con estas características que no tienen aún un umbral. Esta medida persigue evitar una mayor fragmentación en el PE, con el ojo puesto en evitar que las pequeñas fuerzas euroescépticas o ultras, que cuentan con poco apoyo pero hacen mucho ruido, acaben en las bancadas del Parlamento Europeo.
El daño colateral lo sufren «fuerzas políticas como el PNV y tantas otras que están desde el principio en la construcción del modelo europeo, que podrían quedarse fuera si no organizan variopintas coaliciones electorales», ha lamentado Bilbao. Las fuerzas políticas que teman quedarse por debajo de este umbral pueden recurrir a formar coaliciones. Pero para ello «tienes que desdibujar tu proyecto ideológico», ha lamentado el eurodiputado Josep-Maria Terricabras, de ERC.
España tendrá ahora que decidir qué umbral establece para las elecciones europeas de 2024, cuando se prevé que se apliquen los nuevos requisitos. De ponerlo en la cota máxima, no solo los nacionalistas vascos sino también los catalanes, gallegos y valencianos podrían quedarse fuera. Así lo han denunciado los representantes de PNV, Bildu, Compromís, ERC, PDeCAT y BNG en una declaración conjunta, en la que afirman que la medida es «contraria a los valores europeos y empobrece la democracia».
«Muchos millones de europeos van a votar. Y si se les pone un umbral, pequeño o grande, se está evitando que muchos, cientos de miles de europeos, tengan representación parlamentaria en el Parlamento Europeo», ha añadido por su parte Terricabras. Para el de ERC se trata de una «cuestión europea» de carácter «grave», ya que resta «pluralismo político» a la Eurocámara.
Ana Miranda, representante del BNG, ha instado directamente a los socialistas a no apoyar estos cambios —que han sido aprobados con 397 votos favorables, 207 en contra y 62 abstenciones—, ya que dejarían fuera a fuerzas «de las que apoyaron la moción de censura que propició la entrada del nuevo Gobierno» liderado por Pedro Sánchez. Una clara llamada de atención, ya que los cambios son obligatorios para 2024, pero pueden aplicarse antes, por ejemplo en las elecciones de mayo de 2019.