El manifiesto feminista por el que se convoca a la huelga este 8 de marzo (8M) en Cataluña genera división. La Comisión del 8M, encargada de elaborar el documento marco, ha permitido que las organizaciones de cada comunidad introduzcan sus propias reivindicaciones. En el caso de Cataluña, la plataforma Vaga Feminista ha colado en el documento la exigencia de que se retire el artículo 155 de la Constitución.

El manifiesto del 8M catalán, firmado por más de 300 entidades, es un calco del manifiesto marco español al que se han introducido algunas adendas sobre el proceso independentista.

Este es el párrafo más polémico que se ha añadido: “En Cataluña estamos viviendo una escalada de la represión: cargas policiales el 1 de octubre con denuncias de agresiones sexuales. Las feministas también estamos comprometidas con la defensa de la democracia y las libertades en nuestro país y entendemos que la criminalización y la judicialización de formas pacíficas de protesta social y reivindicación política también son formas de violencia institucional que tenemos que denunciar. Por ello, denunciamos la aplicación del artículo 155 de la Constitución española y exigimos su inmediata suspensión”.

Otros párrafos que se han añadido en el manifiesto catalán critican que se destinen fondos públicos a las escuelas del Opus Dei o se exige la despenalización total del aborto. Sin embargo, estos últimos puntos no han generado ninguna controversia pública. En cambio, las referencias al proceso independentista han provocado disensiones.

El PSC se desmarca del manifiesto catalán del 8M por hacer bandera del soberanismo

Las mujeres del PSC se han desmarcado y han difundido su propio manifiesto para apoyar las movilizaciones de este 8 de marzo. En un comunicado, lamentan que se hayan introducido reivindicaciones soberanistas ajenas a la “causa feminista”. Reclaman un manifiesto “sin banderas ni partidismos, con reivindicaciones centradas en las necesidades de las mujeres”. Recuerdan que el manifiesto del 8M siempre había sido unitario porque se elaboraba por consenso.

Los partidos políticos encaran este 8M desde posiciones muy distintas. El PP se ha posicionado en contra de la huelga. La ministra Dolors Montserrat ha dejado bien claro que este jueves irá a trabajar como cualquier otro día laborable. Ciudadanos tampoco apoya una huelga que Albert Rivera califica de “anticapitalista”. Sin embargo, participarán en la manifestación. Los socialistas secundarán los paros parciales de dos horas por turno, pero se oponen a los de 24 horas. Podemos apoyan la huelga general.

Las formaciones independentistas catalanas han hecho suyo el manifiesto. La expresidenta del parlamento, Carme Forcadell, compareció este martes ante la prensa acompañada por las diputadas de ERC para posicionarse a favor de los paros.

 

 

 

 

 

FUENTE: ECONOMIADIGITAL