El excomisario José Manuel Villarejo prestaba las identidades falsas que le facilitaba el Ministerio del Interior como agente encubierto para actividades que nada tenían que ver con la Policía, sino con sus negocios privados. Al menos así se indica en un informe policial al que ha tenido acceso Vozpópuli en el que relata cómo su socio Rafael Redondo usó uno de estos nombres falsos para hacerse pasar por otra persona en el marco de una de las investigaciones de su empresa Cenyt.

Villarejo se encontraba investigando un despacho de abogados por encargo de unos clientes que le pagaron al menos 300.000 euros por estos trabajos. El citado informe policial narra que, en el año 2013, Rafael Redondo se presentó en la sede del despacho de abogados que estaban investigando haciéndose pasar por otra persona llamada Javier Hidalgo.Redondo, detenido en la operación Tándem, es abogado de profesión, socio de Villarejo en el entramado empresarial del polémico mando y nada tiene que ver con la Policía.

Según resalta Asuntos Internos, la identidad de Javier Hidalgo es «coincidente con el de uno de los dos DNI expedidos a José Manuel Villarejo con identidad diferente a la real» que le fueron incautados al excomisario en el registro que se practicó en su casa de la localidad madrileña de Boadilla del Monte tras su arresto en noviembre de 2017.

Fotografía de Villarejo

Según los datos a los que ha tenido acceso este periódico se trata de un DNI con la fotografía de Villarejo, pero a nombre de Francisco Javier Hidalgo Estévez, con número 77399998F y con fecha de caducidad del 03 de diciembre de 2022.

Estos DNI con identidades falsas los facilita el Ministerio del Interior a los agentes encubiertos pero su uso está muy restringido a casos muy concretos y justificados siempre para salvaguardar la seguridad de su portador, según explican fuentes policiales.

Sin embargo, Rafael Redondo usó esta identidad falsa oficial del Ministerio para hacerse pasar ante su objetivo como el responsable de una empresa llamada Hidalgo Comunicación dedicada a «relaciones, lobby etc». Según le dijo al despacho que investigaban, representaba a una empresa familiar alemana con interés de asentarse en España. Le ofrecía una primera toma de contacto «para más adelante concretar una reunión ya más formal».

Rechazaron la oferta

Como era habitual en el proceder de Villarejo y sus colaboradores, Redondo grabó la reunión y el audio, que se adjunta a esta información, ya está en poder de los investigadores. Los responsables del despacho investigado rechazaron la oferta y le dijeron que no estaban interesados. El socio de Villarejo insistió, pero no consiguió convencerles. En realidad, trataba únicamente de tener contacto fluido con ellos para acceder a información del despacho y luego proporcionársela a sus clientes a cambio de dinero.

Este informe policial se encuentra dentro de la investigación de la pieza separada Iron, que investiga la Audiencia Nacional en el marco del caso Tándem. Precisamente este mes la Sección Tercera de la Sala de lo Penal ordenó reabrir esta investigación sobre el encargo que el despacho de abogados Herrero y Asociados hizo al excomisario para espiar a otro bufete de la competencia.

Actuaciones archivadas

El anterior juez encargado de investigar las actividades de Villarejo, Diego de Egea, decidió en julio archivar las actuaciones sobre los responsables del despacho que contrató los servicios de Villarejo alegando que desconocían su condición de policía y por tanto su incompatibilidad para realizar estas labores al margen del Cuerpo.

Tampoco las acciones presuntamente ilícitas que realizó para garantizar el éxito de sus pesquisas. Sin embargo, la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional corrigió esta decisión y desde este mes vuelven a estar investigados Francisco Carpintero, Andrés Medina y Álvaro Martínez, socios mayoritarios del bufete Herrero y Asociados; y a su directora del departamento de marcas externas, María Ángeles Moreno.

 

 

FUENTE: VOZPOPULI