La publicación de un libro muy crítico con la vicepresidenta, citando fuentes del Ejecutivo, y la última encuesta del CIS elevan la tensión en el Consejo de Ministros

Soraya Sáenz de Santamaría y María Dolores de Cospedal, las dos mujeres de confianza de Mariano Rajoy, han protagonizado durante años una ‘guerra fría’ que, con la formación del nuevo Gobierno y la coincidencia de ambas en el Consejo de Ministros, parecía superada. No obstante, la aparente tregua firmada entre ambas a finales del año pasado ha acabado.

Así lo aseguran a El Confidencial Digital altos cargos del Gobierno, que hablan de un nuevo choque entre “dos bloques” dentro del Consejo de Ministros. En este sentido, recuerdan que tanto Sáenz de Santamaría como Cospedal tienen, dentro del Ejecutivo, afines y detractores. Una serie de acontecimientos producidos en las últimas semanas han provocado que ambos bandos entren en disputa.

Del G-8 a “Los Otros”
En la legislatura pasada, el Gobierno ya estaba dividido en dos grandes frentes: el de los “sorayos”, afines a la vicepresidenta, y el llamado G-8, liderado por José Manuel García-Margallo e integrado por José Manuel Soria, Jorge Fernández Díaz, Ana Pastor, José Ignacio Wert, Miguel Arias Cañete, Rafael Catalá e Isabel García Tejerina entre sus integrantes.

La salida del Ejecutivo de todos ellos a excepción de los dos últimos parecía confirmar el fin de la oposición interna a Soraya Sáenz de Santamaría dentro del Gobierno. Pero la elección de Cospedal como ministra de Defensa generó la creación de un nuevo bloque de afines a la secretaria general del PP, integrado por José Ignacio Zoido, Dolors Montserrat y los ya citados Tejerina y Catalá.

A este nuevo grupo de ministros contrarios a la vicepresidenta se le empieza a conocer, dentro del Gobierno como “Los Otros”. Un apelativo que ya ha llegado a oídos de alguno de los implicados y que, desde luego, no ha sido bien recibido.

En medio de ambos bloques se mantienen “Los Nadales” (Alberto, Álvaro y Eva Valle, la mujer de éste último), Íñigo Méndez de Vigo, Alfonso Dastis y Luis de Guindos, que se han convertido en testigos externos de este enfrentamiento. Asisten ‘desde fuera’ a este discreto pulso que están protagonizando los dos frentes desde principios de julio.

Las fuentes consultadas por ECD recuerdan que fue en la primera quincena del mes pasado cuando volvieron las tensiones al Consejo de Ministros, a cuenta de la publicación de un libro muy crítico con Soraya Sáenz de Santamaría.

Titulado ‘ La vice-presidenta ’ y editado por La Esfera de los Libros, la obra de las periodistas Gabriela Bustelo (Voz Populi) y Alejandra Ruiz Hermosilla (ex editora ejecutiva de La Gaceta) muestra a una Sáenz de Santamaría “sin ideología”, con “mucha ambición” y con “poder para controlar los medios de comunicación”.

Unas reflexiones basadas en testimonios que, en ocasiones, respaldan en el libro nombres y apellidos concretos, como el de un José Manuel García-Margallo que no tiene reparos en asegurar que Sáenz de Santamaría “se habría instalado en el PSOE con absoluta tranquilidad”. Pero hay otras que son fruto de confesiones de cargos del Gobierno que prefieren mantener el anonimato.

En este segundo grupo aparecen afirmaciones como la siguiente: “ Es atea y se casó por lo civil en Brasil, pero cuando va al Vaticano se lleva un fotógrafo para hacerse una foto comulgando”. Otra: “Soraya es una pésima enemiga, una mujer que gestiona implacablemente el poder”. Unas frases que, por pertenecer a personas que se identifica como compañeros de Gobierno, han irritado especialmente a la vicepresidenta y sus afines.

Desde que la número dos del Ejecutivo tuvo conocimiento del contenido del libro, “las tensiones y las sospechas han ido en aumento”, aunque no ha habido “ataques directos” posteriores en forma de filtraciones a los medios.

No obstante, la publicación de la última encuesta del CIS la semana pasada ha provocado un rifirrafe en la sombra. Los entornos de Sáenz de Santamaría y Cospedal han protagonizado un sutil cruce de acusaciones entre ambos bloques.

Así, los afines a la vicepresidenta achacan la caída en intención de voto del PP a que “ Cospedal ya no puede controlar al partido pero tampoco deja hacer a Maíllo”, produciéndose un “conflicto de atribuciones” que “genera deficiencias en la gestión”.

Los cargos del partido y del Gobierno próximos a la ministra de Defensa y secretaria general replican, por el contrario, que el PP baja porque Sáenz de Santamaría se niega a que los ministros “pisen más la calle y acudan a actos de partido”, tal y como lleva reclamando María Dolores de Cospedal desde el inicio de la legislatura.

Además, los dos frentes han encontrado en la encuesta de valoración de los representantes del Gobierno del CIS más motivos para el enfrentamiento. Las dos dirigentes bajan su ‘nota’ con respecto a mayo (Soraya pasa del 3,8 al 3 y Cospedal del 3,69 al 2,86). Esto ha sido empleado por sus enemigos para atacarlas.

La distancia entre ambas, no obstante, se mantiene en las ocho décimas, siendo la vicepresidenta la representante del Ejecutivo mejor valorada y consolidándose la ministra de Defensa en el quinto lugar de la lista del CIS.

FUENTE: El confidencial Digital