ALBERTO PÉREZ GIMÉNEZ

 

Nos toman por imbéciles. No hay otra explicación. El Gobierno que no iba a dejar a nadie atrás se ha empeñado ahora en que el centro del debate sea la perentoria necesidad de cambiar, según la vicepresidenta Yolanda Díaz –responsable de Trabajo en el país europeo de los parados- “patria” por “matria”.

Todo este debate de urgente necesidad se hace más intragable cuando la bombona de butano alcanza este martes el precio más caro desde 2015; el de la luz se dispara también el mismo día por encima de los 100 euros el megawatio (el más caro de la año y el segundo más caro de toda la historia) y en este diario se desvela que el proveedor de confianza del defenestrado Ábalos sí que va a salir más fuerte de la pandemia: 53 millones más, concretamente.

«La matria es algo que cuida, que trata por igual a todas las partes, que no discrimina a nadie…” dice ufana la ministra de Trabajo. No. Lo que cuida e iguala es que la bombona de butano –que es utilizada fundamentalmente por las rentas más bajas– no suba este martes un 4,99%, hasta los 15,37 euros. Es la quinta subida consecutiva y toca su nivel más alto desde marzo de 2015.

Desde septiembre del año pasado, el precio máximo de la bombona de butano se ha encarecido un 26,5%. Pero lo importante es no ser discriminados por usar ‘patria’ y no ‘matria’.

La ‘matria’ cuida…

Pero este Gobierno preocupado por la igualdad y por no dejar a nadie atrás prefiere perderse en debates semánticos antes de afrontar la realidad que marcan los recibos. Este martes, como las desgracias nunca vienen solas, el precio medio de la luz en el mercado mayorista alcanzará su récord del año y el segundo más caro de la historia: mañana, el precio medio será de 101,82 euros el mewavatio hora. Solo hace 19 años, el 11 de enero de 2002, hubo un precio de la electricidad más caro. Pero, insisto, según Yolanda Díaz, lo importante es decir ‘matria’ y no ‘patria’. Eso duele más que la subida para cocinar o poner la lavadora…

Eso al menos es lo que piensan también en Unidas Podemos, la parte morada del Gobierno que sujeta a Yolanda Díaz. A la condenada Isa Serra, la representante de una formación que prometía bajar el recibo de la luz cuando llegara al Gobierno, no le parece importar mucho que esa factura se haya encarecido para un usuario medio un 34,6% en la primera quincena de julio con respecto al mismo mes del año pasado. Y los datos son de Facua-Consumidores en Acción, una asociación no precisamente sospechosa para los morados…

Solo faltaba Tezanos para defender el uso de ‘matria’ porque es “una demanda” de un Estado “cercano y cuidador» frente el Estado «patria», el que «pone orden»…

Isa Serra no ha tenido este lunes ni un instante para comentar la subida de la luz y del butano, pero sí para apoyar que se cambie ‘patria’ por ‘matria’. Para la portavoz estatal de Podemos, el uso del término ‘matria’ evoca la tendencia del feminismo de nombrar las cosas de forma diferente para lograr una sociedad cada vez más igualitaria, que se garantice que «nadie quede atrás» y que los cuidados sean una responsabilidad del estado… Mucho mejor usar matria rápidamente que bajar el precio de la luz o del butano, dónde va a parar…

Y en este aquelarre que supone el intento del Gobierno por ocupar la agenda política con debates que nos alejan de lo sustancial solo faltaba el inefable José Félix Tezanos. El ‘capo’ del CIS –que, por cierto, ha sido ratificado en su cargo, como no podía ser de otra manera- ha defendido el uso de ‘matria’ porque es “una demanda” de un Estado “cercano y cuidador» frente el Estado «patria», el que «pone orden», y más identificado con la «autoridad».

Para no parar de reír si no fuera tan dramático que con dinero público y en medio de una pandemia, el debate que intentan colar sea éste. Mientras sube la luz y el butano, la quinta ola sigue avanzando, el sector turístico agoniza, se acerca el fin de los ERTE y el escudo para cientos de miles de parados o Europa no se fía de que España vaya a usar bien los fondos, nuestro Gobierno –el del récord de asesores y los 22 ministerios- gastan su energía en que veamos la importancia de usar “matria” y no “patria”. La patre que les marió