Las 9 de la mañana del domingo, hora a la que empezó el Congreso Extraordinario del PP, han obligado a más de uno y más de dos a duplicar las dosis de cafeína habituales para un día de fiesta. Aunque, para fiesta, la que tienen montada hoy los populares en la Facultad de Economía y Empresa de la Universidad de Murcia, en el campus de Espinardo, donde Fernando López Miras ha sido elegido presidente del partido, con presencia ‘ad hoc’ del presidente del PP nacional y jefe del Gobierno de la nación, Mariano Rajoy. Hay hasta una traca final con concierto incluido de ‘El sitio de mi garaje’, una banda de La Unión, aderezado con ‘beertrucks’ de Estrella de Levante. Innovación ‘popular’.

Todo tiene aire de nuevo. Tanto la sede del congreso (que por primera vez en muchos años no es el Auditorio Víctor Villegas), como por la composición de las mesas presidenciales y las primeras líneas donde, por primera vez también en años, no se ha dejado ver el expresidente del PP y de la Región, Pedro Antonio Sánchez. Sí Ramón Luis Valcárcel, que llegó con tiempo junto a su mujer, Charo Cruz, para recibir a Rajoy.

No tanto para pedir algo de picar en la siempre atractiva cafetería de la facultad, que después de las votaciones se convirtió en el lugar más concurrido, con diferencia. Allí, a eso de las doce del mediodía, hacerse un hueco y comerse una marinera o un simple pincho de tortilla con el que aguantar el tirón hasta los discursos finales parecía una misión más arriesgada que decantarse desde un principio del proceso por el pachequero Antonio Garre.