El vicesecretario responde a las acusaciones de romper la unidad del partido atacando a la exvicepresidenta por no haber integrado «ni en el Consejo de Ministros»
El enfrentamiento entre los candidatos a suceder a Mariano Rajoy se recrudece a medida que se acerca el congreso del próximo fin de semana. La escalada de reproches agudiza la división en el PP y anticipa una difícil reconstrucción tras las primarias. “La soberbia no hace ganar congresos, pero sí perder elecciones”, dijo este domingo Pablo Casado a Soraya Sáenz de Santamaría. Ella pide “unidad”. Él replicó que no había sido capaz de integrar “ni dentro del Consejo de Ministros”.
El viernes fue el vídeo anónimo contra Soraya Sáenz de Santamaría y sus principales valedores (Javier Arenas, Cristóbal Montoro y Celia Villalobos). El sábado Pablo Casado aseguraba que también habían llegado vídeos difamatorios contra él a través de mensajes a los compromisarios, pero no habían trascendido. Este domingo fue el rechazo al debate a dos. Y antes el intercambio de reproches a propósito de la juventud o “mochila” de los candidatos, el género, la gestión en Cataluña… Entre llamamiento y llamamiento a la unidad, los candidatos a las primarias del PP se están despellejando. El tono es más agresivo en el caso de Casado, pero todo apunta a que gane quien gane el sábado el partido necesitará tiempo para que las heridas que deja este proceso cicatricen.
Preguntado por el argumento repetido estos días por Sáenz de Santamaría para rechazar el debate con él —personalmente le vendría muy bien contrastar experiencia, pero haría daño al PP, había dicho ella—, Casado contestó: “La soberbia no hace ganar congresos, pero sí perder elecciones”. Cuando a la exvicepresidenta le enseñaron esas declaraciones, respondió: “Yo no suelo usar calificativos de ese porte respecto a compañeros de partido”.
El vicesecretario del PP también replicó a las acusaciones de romper la unidad y beneficiar a Pedro Sánchez con sus ataques lanzadas desde la candidatura de la exvicepresidenta del Gobierno. “Estamos cinco candidaturas trabajando juntas [las que perdieron en la primera votación]. María Dolores de Cospedal ya desde el primer día que abrimos las urnas ya está colaborando su equipo, y también destacados compañeros de Gobierno, como Isabel García Tejerina (Agricultura), Rafael Catalá (Justicia), Juan Ignacio Zoido (Interior)… Yo sí soy la integración. Toda mi vida política me he dedicado a coser”, dijo, parafraseando la metáfora empleada por la socialista Susana Díaz en plena crisis interna del partido. Ya queda poco en las primarias del PP que no recuerde a las del PSOE.
El equipo de Casado no descarta que la propia Cospedal participe en un acto de campaña junto al vicesecretario. La exsecretaria general se ha visto estos días con ambos candidatos
Sáenz de Santamaría, Casado y sus respectivos apoyos se han enzarzado en una disputa sobre cuándo debe hacerse la integración. La exvicepresidenta mantiene que antes del congreso y en su candidatura porque “el PP siempre ha defendido que gobierne la lista más votada” —ella obtuvo 1.558 votos más que Casado en la primera vuelta—. El vicesecretario recuerda que las normas que se dieron a sí mismos fue votar en una doble vuelta y que integrará después de la votación del sábado si gana.
“Si yo he sido capaz de integrar, en una hora, cinco candidaturas, ¿cómo no voy a ser capaz de integrar a una persona tan estupenda como Soraya Sáenz de Santamaría?”, dijo Casado. “Otras candidaturas no fueron capaces de integrar ni dentro del Consejo de Ministros”, añadió en un acto junto a José Manuel García-Margallo, excompañero de gabinete de Sáenz de Santamaría que antes de que comenzara la campaña prometió hacer “todo lo posible” para que no fuera candidata.
La polémica por el vídeo anónimo contra la exvicepresidenta sigue coleando. El comité organizador del congreso del PP tendrá que reunirse y evaluar la solicitud del equipo de Soraya Sáenz de Santamaría a su presidente, Luis de Grandes, para investigar su origen y pedir explicaciones a quienes colaboran “formal o informalmente” con el equipo de Casado. La candidata justificó su decisión de pedir al PP que intervenga para que no haya más vídeos, ya que la grabación terminaba prometiendo un “continuará”. “En el PP no habíamos vivido nunca ese tipo de cosas”, lamentó. El vicesecretario también utilizó este domingo el asunto para lanzar un nuevo reproche: “Yo jamás acusaría a ningún otro candidato de haber hecho vídeos contra mí. A quien perjudica ese vídeo es a mí”.
DEOLOGÍA O «COMPLEJOS»
Las propuestas presentadas durante la campaña de primarias por Pablo Casado suponen un giro a la derecha de las políticas de los casi ocho años de Gobierno de Mariano Rajoy y han abierto una batalla ideológica dentro del partido. “Yo no tengo complejos en defender nuestros principios”, insistió este domingo el vicesecretario, de 37 años, para diferenciarse de la candidatura rival, que sostiene que el PP no precisa refundarse o reinventarse .
“El PP necesita un debate ideológico”, reafirmó Casado durante un acto de campaña en Alicante. El candidato ha prometido una convención extraordinaria sobre principios y valores si gana el congreso.