El jefe de los socialistas, Pedro Sánchez y el líder del Partido Popular, Pablo Casado, se han reunido de forma discreta este lunes en la Moncloa a petición del presidente del Gobierno en funciones. El PP ha informado que Casado ha asistido al encuentro «por lealtad institucional» y que no lo ha hecho público previamente por respeto al formato que se ha elegido desde el entorno presidencial.
En dicha reunión, que ha sido privada, ambos dirigentes han hablado de la investidura y Casado ha confirmado a Sánchez que como ya le había dicho anteriormente, no podrá contar con su colaboración ni con apoyo directo ni con una abstención para resultar investido. El PSOE, por su lado, ha apuntado que las posturas de los representantes de ambas formaciones políticas sobre la investidura «siguen estando alejadas».
Además, Casado ha aprovechado el cara a cara entre ambos para expresarle su desacuerdo sobre el pacto que los socialistas navarros han alcanzado en torno a la Mesa del Parlamento navarro, donde ha entrado Bildu, y también le ha reiterado sus ya conocidas posiciones en lo que concierne a la política en Catalunya y la Unión Europea, donde el PP apoya que España intente lograr puestos de máxima relevancia en el nuevo ejecutivo europeo que se debe terminar de conformar en los próximos días, una vez que los mandatarios europeos se han dado una tregua para intentar consensuar sus posiciones al respecto.
Cs rechazó una cita discreta en Moncloa
Ciudadanos ha explicado por su parte de que el lunes de la semana pasada Moncloa solicitó una reunión discreta con Albert Rivera. Pero el presidente de Ciudadanos rechazó dicho encuentro ya que «le ha dicho en dos ocasiones y en persona, y otra en la reunión con el jefe del Estado, que los electores han querido que Cs haga una oposición seria, firme y constructiva y que la dirección de Cs ha respaldado no apoyar la investidura, ni por activa ni por pasiva, del señor Sánchez».
Rivera le pidió a Sánchez en la última reunión pública que formara gobierno cuanto antes.