Pocos días antes de los atentados de la Rambla de Barcelona y de Cambrils, la célula yihadista que llevó a cabo la acción terrorista en la que murieron 16 personas se grabó preparando los explosivos en la casa de Alcanar. La cinta, que está en manos de las Fuerzas de Seguridad del Estado y ha estado custodiada durante un año en una caja fuerte —no existen copias—, incluye violentos comentarios de los miembros del grupo liderado por el imán de Ripoll. «Esto lo hacemos para que estallen las putas cabezas de vuestros hijos», dice en uno de los planos uno de los terroristas, informan a El Confidencial fuentes de la investigación.
La grabación, cuya existencia adelantó la extinta ‘Interviú’, dura más de una hora y muestra distintas fases de la preparación de los explosivos. En uno de los momentos, puede apreciarse que el único acusado por la masacre que permanece en prisión provisional, Mohamed Houli, herido en la explosión de la casa franca, es el encargado de grabar a sus compañeros que, en ese momento, preparan lanzagranadas caseros con tubos de metálicos. Gran parte del material utilizado por la célula habría salido de la metalúrgica de Ripoll en la que trabajaba Mohamed Hychami, Comforsa.
La cámara pasa de mano en mano. En una secuencia, aparece ante el objetivo Younes Abouyaaqoub, el conductor de la furgoneta asesina de Las Ramblas que fue abatido en la comarca de Subirats tras protagonizar una larga huida. En la toma, embute con explosivo un cilindro mientras se dirige a la cámara del móvil con el que se registraron las imágenes. Houli le pregunta: «¿Eso para qué sirve?», y el aludido le explica de una forma muy gráfica: «Esto hace boooooom».
Según las fuentes consultadas, en el vídeo se comprueba que los miembros de la célula se regocijaban con sus planes. En muchos de sus fragmentos, como por ejemplo en el que se refieren a la muerte de niños, los terroristas estallan en risas. Asimismo, la cinta también deja claro que no tomaron ningún tipo de precaución para elaborar el TATP (triperóxido de triacetona), un explosivo de fabricación casera extremadamente inestable. En las imágenes, aparecen rellanando los cilindros metálicos con esta sustancia como si estuvieran jugando con harina. También se prueban chalecos cargados de TATP sin tomar medidas especiales. El explosivo aparece incluso en el suelo de la estancia. Probablemente, en el momento en el que se grabó el vídeo, trataban de secar la última parte de su producción. Se estima que llegaron a fabricar 250 kilos de este material. No les dio tiempo a más porque el TATP terminó saltando por los aires. La casa de Alcanar, repleta de bombonas de butano, reventó en una enorme deflagración.
Fuentes del caso también confirman que en las imágenes no aparece el presunto cerebro del grupo, el iman Abdelbaki es Satty. Su cuerpo apareció en los escombros de la vivienda, pero la cinta se habría grabado antes que se desplazara hasta Alcanar para supervisar la última fase de preparación de la masacre. En ningún caso contemplaba morir en los atentados, pero los planes no salieron como pretendía.
