EL CUENTO ORIENTAL DE LA DEMOCRACIA A LA ESPAÑOLA
ANALISIS COLECTIVO «OPINIÓN PÚBLICA».- Miedo a las reacciones organizadas, calculadas y puestas en marcha por los poderes políticos de los Gobierno del Estado, Comunidades Autónomas , y en los pueblos que son gobernados con mano de hierro por los ayuntamientos, los partidos y sus militantes, activistas, enchufados o premiados. El miedo silencioso como un cáncer presiona con gran fuerza en el sector del empresariado, familiar y medio, así como entre los autónomos, muy especialmente a los que trabajan las obras públicas locales y regionales. Hace unas semanas un murciano que dirige una empresa media de la construcción y otras actividades, nos confirmaba en una comida campera, entre viejos amigos, que la vigilancia de los poderes políticos y por ende los fiscales y bancarios-antes con las Cajas politizadas que terminaron arruinadas- ha sido y es inquietante, gobierne quien gobierne. Ellos, los políticos y sus colaboradores y clientes, han levantado grandes negocios de los que comen y viven espléndidamente, y sus partidos, como también han sido los sindicatos, han formado unos lobbys inimaginables con sucursales en todo el país y en el extranjero, formando lo que hoy se llaman Sistemas. Estas organizaciones globales utilizan los mismos medios que diseñan los capos de las mafias de todos los colores políticos, sean de izquierdas, derecha, centro, populistas, fascistas, religiosos o informativos que se denomina el cuarto poder por su potencia manipuladora, cuestión a descubrir en España, a tirar de la manta y mostrar a los 46 millones de ciudadanos cuanta porquería hay en este influyente sector de la vida nacional. Hay excepciones, claro está, en todos los segmentos sociales, pero suelen terminar en la hoguera, quemados, hundidos o resistiendo en las trincheras de la transparencia poniendo dinero de sus bolsillos o a la honradez de desconocidos mecenas. Y es más, cuando todos ellos se ven en serios apuros y aprietos, forman una división blindada o compran mercenarios y púnicos extremadamente peligrosos. O te hacen regalos millonarios con la publicidad oficial de las cuatros administraciones. Local, regional, diputaciones y nacional. Un rodillo arrollador. En la reciente crisis crapulosa con el tema de la corrupción generalizada, los graves errores peperos, la oposición de un populismo que está demostrando sus puntos flacos y el toreo de salón de los separatistas, los medios de comunicación sobre todo en los estudios de las televisiones que surgieron para romper al PSOE y a IU, han colaborado fuertemente para llevar a Pedro Sánchez a La Moncloa. Pero ojo, mañana le puede tocar una patada en el trasero y a su matriarcado.
El déficit democrático, las libertades más personales, están en difícil situación con una crisis devastadora en los municipios, y algo menos en las grandes ciudades donde la cultura es mayor, pero más refinada y cruel. La cruel y dura realidad es que el Estado de Derecho necesita una limpieza despolitizada que debe de salir de los hombres y mujeres, de los profesionales que ejercen la Justicia rectamente y cuando se pongan la toga, recuerden que también se puede procesar a los poderes fácticos, aquí en Murcia o en Sevilla o en Barcelona. Lo de Murcia es muy fuerte, y se dice en la calle que todo es debido a la fuerte influencia de un solo hombre en Madrid y sus adláteres.
Y finalmente una simple anécdota que nos comentaba ayer nuestro compañero Cano Vera:’’ Hoy lunes, mi hijo, ha descubierto que en la única librería del pueblo, un solo comprador se ha llevado nueve ejemplares del libro que he escrito ‘Y VALCARCEL NO SE ENTERABA’. Debe ser un admirador, Javier, le he comentado asustado y claro, emocionado, por tanta pasión’’. Palabra que en el trasfondo de la anécdota hay cosas más serias que nos hacen temblar las piernas. Otros no duermen, los UCO y los fiscales. Ya veremos quienes ganan la partida de ajedrez con defensa siciliana. Para echarse a llorar que esta gran ocasión de levantar una sólida Democracia corra el gravísimo riesgo de terminar violentamente. Perdimos una ocasión histórica con el nacimiento de la segunda República. Algunos nos tememos que ganen los malos.