Comienza la nueva planificación hidrológica 2021-27.

La desalación se va a convertir en una de las «tres patas» básicas que sostengan la cuenca del Segura. En dos años, cuando comience la nueva planificación hidrológica en esta demarcación (horizonte 2021-2027), se prevé que las tres plantas que ya abastecen a la cuenca (Torrevieja, Águilas y Valdelentisco) ‘alcancen’, e incluso superen, la aportación de recursos a los regadíos y al abastecimiento del Levante procedentes del Trasvase del Tajo y los propios del Segura.

El presidente de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), Mario Urrea, explicó ayer que actualmente se producen 128 hm?3; de agua desalada y que «el potencial último» es de unos 400 hm?3;, «disponibles, creemos, en 2021».

«Al final van a ser tres patas que van a pesar los mismo: recursos superficiales de la cuenca, unos 300 hm3 de media; 325 hm3 de media del Trasvase y la desalación va a ser, también de media, entre 300 y 400 en dos años», dijo, insistiendo en que «la desalación pesa ya tanto o más que las aguas superficiales».

A estas cifras se añaden los recursos que se consiguen con la reutilización de las aguas depuradas, que están en torno a los 100 hm?3; anuales.

El plan del futuro

Mario Urrea hizo estas declaraciones antes de la reunión de la primera mesa de participación pública, la del sector agrario, dentro del proceso de elaboración del tercer ciclo de planificación hidrográfica en la cuenca del Segura horizonte 2021-2027.

«Se trata de poner en valor este proceso porque al final el plan de cuenca tiene un contenido normativo, además de datos y cifras, en el que se dice cómo y a quiénes van dirigidos los nuevos recursos que se generen en la cuenca», apuntó. Indicó que «es un compromiso del Ministerio, y delegado del Gobierno, Diego Conesa, de ordenar cuanto antes todas las aguas procedentes de la desalación, que ha llevado hasta ahora un proceso administrativo que consideramos excesivo».

La sociedad estatal Acuamed, gestora de las desalobradoras, no puede ampliar físicamente las plantas mientras no estén otorgadas las concesiones, indicó Urrea.

«Es la pescadilla que se muerde la cola», comentó el presidente de la CHS, e insistió en que el nuevo plan va a permitir cuantificar todo el volumen de agua desalada del que se va a poder disponer en este nuevo ciclo.

 

 

FUENTE: LAOPINIONDEMURCIA