Dos imágenes del fotógrafo de la agencia Reuters Iván Alvarado representan los dos estados de ánimo entre los independentistas que escuchaban el discurso en una pantalla gigante a las afueras del Parlament

 

Pasadas las 19.30 horas, Carles Puigdemont proponía declarar la independencia pero suspender sus efectos para abrir un proceso de diálogo. En la calle, los manifestantes convocados por la Asamblea Nacional de Cataluña (ANC) y ÒmniumCultural esperaban una proclamación de la independecia que no llegó. En apenas unos segundos, el estado de ánimo pasó de la algarabía a la decepción.

«Asumo, al presentar los resultados del referéndum, el mandato del pueblo de que Cataluña se convierta en un Estado independiente en forma de república»… Avanzaba Puigdemont.

La declaración de Puidemont, resumida en estas dos fotografías
Iván Alvarado (Reuters)

 

Pero a continuación, añadía: «El Govern y yo mismo proponemos que el Parlament suspenda los efectos de la declaración de independencia para que las próximas semanas emprendamos un diálogo sin el cual no es posible llegar a una solución acordada».

La declaración de Puidemont, resumida en estas dos fotografías
Iván Alvarado (EFE)

 

De la euforia a los pitos en tan solo unos segundos.  Decepción generalizada en la avenida Lluys Companis donde se habían repartidos carteles de » Democracia», donde otros habían escrito » Benvinguts a la República Catalana » y donde finalmente todos se han ido a casa con la sensación de que esperaban más .

Los más mayores decían que seguían confiando en Puigmedont después de su intervención mientras que los jóvenes se sentían decepcionados y algunos «traicionados».

Otros muchos confían en la llamada vía eslovena y decían que sabían que este no era el día definitivo .

Nada más acabar Puigdemont, la mayoría de la gente se ha marchado porque no tenían nada que celebrar y solo se han quedado jóvenes , que en muchos casos decían identificarse con la Cup. Ese grupo más reducido se ha quedado a escuchar a la líder de la CUP y han ovacionado su intervención.

La CUP ha expresado su rechazo a que la declaración de independencia sea suspendida a la espera de una mediación que no se ha producido y con «un Estado español que no quiere» que se produzca, por lo que ha advertido que «no renuncia» al objetivo de una declaración efectiva y con carácter inmediato.

 

 

FUENTE: CADENASER