Pedro Sánchez ha llevado a cabo una campaña presidencial de bajo perfil con poca presencia de los barones socialistas en entrevistas nacionales u otros formatos que no sean el tradicional mitin; salvo el valenciano, Ximo Puig, que el domingo también se juega su reelección.

Era una elección «de futuro», se decía en Ferraz, no de pasado ni con la necesidad por parte del candidato de verse arropado porque un presidente del Gobierno siempre tiene mucho más tirón que sus adversarios. Pero en esta última semana, coincidiendo con informaciones sobre unos malos tracking de voto tras los debates televisivos, han empezado los nervios y se empieza a tocar a rebato en el PSOE. Este mismo jueves, Sánchez no se ha cansado de llamar al voto útil contra el tripartito de derecha:

De la llamada vieja guardia, solo José Luis Rodríguez Zapatero se ha prestado a participar en dos mítines, el 9 de abril y este viernes, que cerrará en León, su provincia; ni Felipe González ni Alfonso Guerrani Alfredo Pérez Rubalcaba -enfrentados al actual líder del PSOE- han querido participar y eso ha derivado en una campaña «extraña».

Así lo admiten cargos de diferentes federaciones, que intentan explicarlo con el argumento de que los presidentes regionales «se la juegan» en las autonómicas y municipales del 26 de mayo y no quieren contaminarse con un mal resultado este domingo; sobre todo el castellano-manchego. Emiliano García-Page -esta mañana estará en Toledo con Sánchez-; el extremeño, Guillermo Fernández Vara; y el aragonés, Javier Lambán.

El ‘desmarque’ de Lambán

Solo Lambán ha roto ese silencio mediático este martes por la mañana para decir, tras el primer debate en TVE, que él «conoce» al candidato socialista y bajo ningún concepto indultará a los políticos catalanes procesados por el referéndum ilegal del 1-O. Afirmación que sonó más a desmarque de las evasivas del presidente del Gobierno la noche anterior en el debate en TVE, a pesar de las preguntas insistentes de Pablo Casadoy Albert Rivera.

Sánchez dijo que no puede negar a nadie el indulto de forma «preventiva», algo que a PP, Ciudadanos y, sobre todo, Vox, les está dando mucho voto fuera de Cataluña, y eso preocupa en los cuarteles generales de las federaciones porque pone al PSOE a la defensiva frente al resto de partidos. Particularmente eso ocurre en un Aragón fronterizo con Cataluña.  

Díaz y el resto de los ‘barones’ mirarán con lupa el resultado de este domingo en las primeras elecciones que afronta Sánchez desde el poder

Pero el candidato socialista y su equipo tienen claro que la campaña es suya y «de futuro», no del pasado que representan González Guerra o Rubalcaba. Lo dejó claro el secretario de Organización del PSOE y coordinador de la misma, José Luis Ábalos, hace semanas. 

Justificó la ausencia de los expresidentes en que el PSOE quiere mirar al futuro. «Nosotros no estamos en una apuesta esencialista sino claramente de futuro», dijo. El PSOE tiene a Sánchez y el PP necesita buscar «esencias» y «principios» recuperando a José María Aznar

A pesar de estas palabras de Ábalos, Ferraz sabe que los críticos, empezando por Susana Díaz, aunque en público se deshagan en elogios y llamen a la movilización, están esperando al secretario general este domingo si saca un mal resultado que no le permita seguir gobernando. Es más, según fuentes de otros partidos en Andalucía consultadas por Vozpópuli, la campaña que está haciendo el PSOE-A no está siendo todo lo «movilizadora» que debiera dado que el partido se juega nada menos que La Moncloa.

Poca movilización del PSOE-A

Díaz perdió el poder autonómico en las elecciones del dos de diciembre pasado, y el secretario general quiere quitarla del poder orgánico en el PSOE-A. Si gana este domingo las elecciones, nada le impedirá seguir su hoja de ruta, pero si pierde, ella y sus apoyos no se lo van a poner tan fácil a Pedro Sánchez. Sobre todo tras la humillación que sintió la lideresa andaluza en la confección de las candidaturas a Congreso y Senado en las ocho provincias de esa comunidad. 

En el resto de los territorios gobernados por el socialismo, los Page, Lambán, Vara, pase lo que pase este domingo guardarán silencio, porque ellos también están en el alero hasta el 26 de mayo, apenas dentro de un mes. Eso explica su actitud reservada aunque en algunos sectores de sus federaciones se cree que Ferraz no ha movilizado «todo lo que hubiera debido», teniendo en cuenta, además, que la primera parte de la campaña era Semana Santa y España estaba de vacaciones.

 

 

FUENTE: VOZPOPULI