ROQUE ORTIZ

 
 
NO LO CONOZCO personalmente pero he oído hablar mucho de este personaje que nunca debió estar en una lista inteligente para tocar poder en el Ayuntamiento, y aún menos para ocupar la concejalía que ostenta, pero el que manda hoy y así mismo mandaba entonces, y ya se sabe que el omnipotente dedo de Ramón Luis Valcárcel suele tocar el infinito, le tocó el hombro al alcalde PEPE BALLESTA, ex rector de la Universidad de Murcia y aficionado al buen baloncesto, para que el genio vociferante de Roque ocupara ese puesto, porque «estaba convencido el Sultán que era conveniente para el Partido Popular y su camarilla de mecenas que tanto ayudan para que Murcia crezca». Estas palabras entrecomilladas no las he oído personalmente, pero seguro que fue así o mi comunicante está equivocado sobre lo que dijo Ramón Luis ayer y hoy, que ROQUE ES INTOCABLE.  
 

 

Pero dicho esto, para conocimiento general, mi  olfato profesional me dice que lo de verdad va en el choque entre todos, los unos y los vándalos, es derribar al alcalde BALLESTA, ya considerado por un amplio sector de la opinión pública murciana como el hombre fuerte que el PP necesita para no caer por los riscos de Sierra Espuña. Esta misma opinión la manifestó recientemente nuestro compañero José Juan Cano Vera, aquí, en MURCIA TRANSPARENTE, claro que como opinión personal pero basándose en su larga experiencia de periodista, ex director de varios diarios, y político, ex secretario general regional que se fue huyendo de la quema pepera cuando apareció la sombra fantasmal de Ramón Luis y su protector Aznar que no podía ver ni en pintura a Calero, porque le sobraba. A Aznar siempre le ha interesado rodearse de ignorantes y mediocres, algunos de ellos siguen en el machito.           
 

 

 

 
Montar tal número de teatro en el Ayuntamiento, mezclados peperos , la izquierda moderada y las plagas extremistas, huele a contubernio franquista, porque lo que dijo Roque, fue una bellaquería impresentable, pero no hay que clamar al cielo, porque en el mismo Parlamento nacional como en las tertulias televisivas  nacionales se han dicho peores cosas. Hasta calumnias, sobre todo utilizando a ese bicho analfabeto de Rufián y su corte de mequetrefes, que le aplauden. Por ejemplo, cuando Pablo Iglesias injurió gravemente a Felipe González y el caimán catalán a Mariano Rajoy con las esposas y otros ataques de tipo sexual o invadir una capilla con los pechos al aire. Y muchos recordamos como Alfonso Guerra llamó a Suárez tahúr del Missisipi. Y el Coleta hace pocos días le faltaba notoriamente el respeto al Rey, que el hombre pasaba por allí paseando a sus chiquillas.                                                                   

 

Tampoco hay que olvidar la grosería de Valcárcel dirigida al líder socialista catalán, MARAGALL, todo un personaje, al que vino a llamar borracho utilizando un lenguaje tabernario, así como al juez Abadía, del TSJ que se atrevió con dignidad de buen profesional del Derecho, a enjuiciar a familiares del entonces presidente de Murcia. Sí, estamos ante un montaje político repugnante propiciado por un concejal del Partido Popular impresentable, que pudiera hacer «tirar la toalla» a un hombre valioso como Ballesta. Estamos o no en ese adagio ignominioso de «mata al Rey y vete a Murcia». Tanto asco, repugna. Cuidado LÓPEZ MIRAS, no hagas de cómplice y esquiva las arenas movedizas.
 

 

Así que por favor no poneros educados y duros, ya que el que esté libre de pecado o chorradas de baja estofa que arroje la primera piedra, y se dejen de maniobrar para cepillarse al alcalde Murcia capital, que les estorba, resistiendo, negociando y trabajando. No digo que sea perfecto, pero a la vista de la gentecilla que nos gobierna en muchos casos, mejor es tener el pico callado. Y Roque, si como se ha visto con tu esperada decisión aprecias de verdad a tu alcalde, «tira de la manta». Le harías un último favor, descubriendo el pastel coaligado y a ti mismo.                 
 
 
(Carta de dimisión Roque López a José Ballesta)
 

COLECTIVO  OPINIÓN PÚBLICA