La decisión de Pedro Sánchez de gobernar en solitario y la confección del nuevo Ejecutivo, con la elección de Fernando Grande-Marlaska para la cartera de Interior, «un ministro que parece del PP» según Pablo Iglesias, ha multiplicado el malestar de Podemos con el séptimo presidente del Gobierno desde la restauración de la democracia y tercero del PSOE. «Pasar por La Moncloa con el Gobierno más débil de la historia de España probablemente va a ser un calvario para Pedro Sánchez», ha advertido el líder de Podemos en una entrevista en Televisión Española. «Ha hecho un Gobierno con gente que le gusta a Ciudadanos y al PP y con ninguna figura cercana a nosotros. Es una declaración de principios… Sánchez ha sonreído a Mariano Rajoy y Albert Rivera y parece que ha tardado 24 horas en olvidar quién le ha hecho presidente del Gobierno», ha apostillado sobre los relevantes guiños al centro del nuevo Ejecutivo. Pablo Echenique ha avisado que harán una “oposición dura” si no se cumplen sus expectativas.
Iglesias ha reiterado su disposición a ser el socio preferente del líder del PSOE, que cuenta con 84 diputados en el Congreso, su representación más baja. «La decisión de Sánchez es imprudente. Ningún presidente en España ha tenido un apoyo tan escueto, ya hemos visto las dificultades de Rajoy», ha manifestado, lanzando el mensaje entre líneas de que el PP contaba con 137 diputados más el apoyo de los 32 de Ciudadanos en el Parlamento pese a la competencia entre ambas formaciones por la hegemonía entre el electorado de centro derecha.
La tregua o “mínima cortesía parlamentaria” con el Gobierno entrante durará “una, dos o tres semanas”. Dependerá, ha subrayado Iglesias, de los próximos pasos que dé el Ejecutivo y si desarrolla una agenda social del gusto de quien aspira a ser su socio preferente. Iglesias ya ha dejado claro que la aspiración de Podemos es ejercer como la oposición de izquierdas del Ejecutivo. «Vamos a poder gobernar desde el Parlamento. Normalmente el que se desgasta es el que está en el Gobierno», ha afirmado. En este sentido, Podemos ha emplazado a Sánchez a que en su primer Consejo de Ministros adopte las medidas necesarias para equiparar las pensiones a la subida del IPC y acabar con el factor de sostenibilidad, así como ampliar a 16 semanas los permisos de paternidad y maternidad y que sean iguales e intransferibles. La portavoz de Podemos y sus confluencias en el Congreso, Irene Montero, se ha ofrecido al PSOE a negociar el techo de gasto pero con una reducción más lenta del déficit para así y disponer de más recursos para educación, sanidad, dependencia y pensiones.
El máximo responsable de Podemos ha reconocido que no ha vuelto a hablar con su homólogo del PSOE desde que el viernes pasado el éxito de la moción de censura contra Rajoy convirtió a Sánchez en presidente. «Nosotros les vamos a dar todo el aire del mundo si están dispuestos a implementar una agenda legislativa acordada con nosotros. Si prefieren ponerse de acuerdo con el PP o Ciudadanos ellos verán», ha avisado el secretario general de Podemos a Sánchez. La propuesta de este partido y sus confluencias desde que hace dos semanas Sánchez anunciase la presentación de la moción de censura que terminó desbancando a Rajoy -Podemos la apoyó sin condiciones- fue que optara por un Gobierno sustentado en los 156 escaños que saldrían de la unión de fuerzas de socialistas (84) con Podemos (67), Compromís (4) y el de Nueva Canarias.
La determinación de Sánchez de presidir una Administración socialista no ha sorprendido en Podemos. En la dirección de Iglesias daban por hecho días antes de que prosperara la moción de que en ningún caso formarían parte del Gobierno. Lo que no esperaban era la elección de perfiles como el de Grande-Marlaska como ministro del Interior. Montero ha afirmado que Sánchez buscaba que los ministros “gustaran más al PP y a Ciudadanos” en vez de en “tener una buena relación con aquellas formaciones”, como Podemos y sus socios, que votaron a favor de la moción de censura. “Decir que es un Gobierno que hace guiños al PP y a Ciudadanos y que no está pensado para tener la mejor de las relaciones con espacios políticos que votamos a favor de la moción es una evidencia”, ha apostillado.
«Hay que juzgarles por los que hagan y no por lo que han hecho. Que no se hable tanto por el curriculum vitae de sus miembros sino de sus políticas», ha observado Iglesias sobre los componentes del gabinete de Sánchez. El nuevo ministro de Interior ha centrado sus críticas. De Grande-Marlaska ha subrayado que es «de la órbita» de Carlos Lesmes, presidente del Consejo General del Poder Judicial y que apostó por la condena de los participantes en la protesta que rodeó el Parlament de Cataluña en 2011, a raíz del 15-M. También ha recordado que ordenó abrir juicio contra dos humoristas de la revista satírica El Jueves por una viñeta de Felipe VI cuando era Príncipe de Asturias.
El ministro de Exteriores, Josep Borrell, tampoco es del agrado de Podemos. En concreto, por su participación en actos de la Sociedad Civil Catalana junto a cargos de Ciudadanos y el PP, como Xavier García Albiol, líder de los populares en Cataluña, en la etapa más dura del procés. “A ningún progresista le gusta recordar la imagen de Borrell abrazando a Albiol y rodeado de figuras de la extrema derecha”, ha apuntado Iglesias. No obstante, el secretario general de Podemos destacó su “formación notable”.
FUENTE: ELPAIS