El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha pedido que el cierre de toda actividad no esencial decretada por el Gobierno a partir de este lunes para frenar aún más la expansión del coronavirus se haga de forma «correcta y previsible», de modo que no sea «abrupto» y se dé «un tiempo» para ello.

En la rueda de prensa posterior a la reunión por videoconferencia de este domingo con el presidente del Ejecutivo central, Pedro Sánchez, y el resto de líderes autonómicos, el mandatario gallego ha mostrado su «preocupación» por «desconocer con detalle» en qué consiste esta nueva medida del estado de alarma y ha insistido en conocer el contenido del decreto aprobado en Consejo de Ministros antes de que salga publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE).

Aunque el presidente del Gobierno les trasladó que «esta tarde» tendrían más información al respecto, Feijóo ha dicho tener «la sensación» de que no lo conocerán antes de su publicación. «Y nuestras alegaciones y consideraciones probablemente no podamos hacerlas», ha lamentado.

En la comparecencia ‘online’ posterior a la reunión, el titular de la Xunta no ha ocultado que las medidas de confinamiento mantenidas hasta ahora «eran algo bastante razonable» y las únicas actividades que se mantenían «eran correctas», aunque «había que extremar las condiciones de seguridad» para evitar contagios.

A pesar de esta discrepancia, Feijóo entiende que es «una decisión muy difícil por parte del Gobierno». No obstante ello, ha añadido: «Nos preocupa el desconocimiento con detalle, hasta el momento al menos, de en qué consisten las medidas, en qué sectores económicos van a impactar, cuántos empleos se pueden ver afectados».
 

Preocupación por ciertos sectores

Feijóo has trasladado su preocupación sobre la afección de estas nuevas medidas a ciertos sectores industriales de Galicia. Así, por ejemplo, se ha referido a la planta de Alcoa San Cibrao, en Cervo (Lugo).

«No se puede apagar Alcoa», ha llegado a decir Feijóo, quien también ha avisado de que, de ser así, la fábrica podría «cerrar indefinidamente».

A su «preocupación» también ha añadido el sector de la conserva y las gestorías, porque «si no se mantienen abiertas no se van a poder tramitar los ERTE».
 
 

FUENTE: ELESPAÑOL