El municipio recibe con carteles de «no sois bienvenidos» y lazos amarillos a la comitiva de Cs

El minuto de silencio no ha sido de silencio y los discursos apenas se han escuchado. Unas fuertes sirenas y alarmas de coche activadas a la vez han boicoteado el acto de homenaje a las víctimas del terrorismo que ha tratado de celebrar Ciudadanos este jueves en Ugao – Miraballes (Bizkaia), el pueblo de Josu Ternera. La comitiva del partido, encabezada por el líder, Albert Rivera, y la candidata de Cs a las elecciones europeas Maite Pagazaurtundúa ha dado un breve paseo por la localidad, entre gritos de «fascistas» y «provocadores».

En la plaza del Ayuntamiento, adornada con lazos amarillos y pasquines en el suelo en los que se leía «fuera de aquí», una concentración de unas doscientas personas se ha girado —la mayoría en silencio— para darles la espalda a su paso. «Egun on«, les ha dicho Rivera. La pancarta que portaban los manifestantes decía: «No sois bienvenidos. Así no”.

 El ambiente ha sido tenso, aunque no se han producido incidentes. El pueblo ha querido hacer notar que Ciudadanos no era bien recibido. Lo decían los carteles por las calles y, sobre todo, lo han manifestado esas fuertes sirenas y bocinas que apenas les han dejado hablar. Estas se han activado al unísono en los alrededores de la plaza en la que se ubica el frontón de la localidad, a la que han llegado los dirigentes de Cs tras un recorrido de unos 400 metros, desde la ermita y pasando por la plaza del Ayuntamiento. Todo ha sido muy rápido, en apenas 40 minutos. Un dispositivo de la Ertzaintza con una veintena de antidisturbios ha custodiado en todo momento a los políticos de Ciudadanos.

Con dificultad por el fuerte ruido de fondo, Pagazaurtundúa, que perdió a un hermano asesinado por ETA, ha tratado de explicar que su presencia en el municipio vasco en el que el pasado sábado se celebró un homenaje a Josu Ternera estaba justificada «para defender la democracia». «Hoy estamos aquí defendiendo los derechos civiles, al pluralismo ideológico, a ver si os enteráis», ha exclamado la candidata, flanqueada de la comitiva de Cs: además de Rivera, el secretario general, José Manuel Villegas, y los diputados Edmundo Bal y Joan Mesquida. Varias decenas de militantes de Cs llegados de fuera del País Vasco les acompañaban.

«No da igual cómo se termina el mundo del terrorismo. Vosotros consideráis que el fin de ETA era legítimo y matar ha sido legítimo», ha enfatizado Pagazaurtundúa, que ha hablado en euskera y castellano. Llevaba dos libros en los brazos, «Vidas Rotas», un compendio de historias de las víctimas de ETA, y «Memorias de la Violencia», sobre los exiliados del País Vasco por el terrorismo.

Tras ella, Rivera ha tomado la palabra para defender que «hay lugares de España donde la libertad está amenazada». «Que no dejen hablar a candidatos a unas elecciones democráticas es una prueba de que hay que ir a todos los pueblos de España», ha subrayado el líder de Cs, que ha partido en dos como símbolo uno de los carteles que también se ven en las calles del pueblo con la imagen de Josu Ternera y la palabra «libertad». «Cuando hacéis homenajes a Josu Ternera no ponéis sirenas, esa es la vergüenza», se ha quejado Rivera ante el boicot a su acto. «No nos habéis callado con tiros, así que no nos vais a callar con sirenas». El partido registrará una ley en el Congreso para que se prohíba cualquier homenaje a etarras. Tras los breves discursos, el grupo ha aplaudido y gritado «libertad».

La plaza del Ayuntamiento de Ugao-Miraballes ha amanecido este jueves adornada con carteles contra la presencia de Ciudadanos y pidiendo la libertad del etarra. “Fuera de aquí”, “No pasaréis por Euskalherria”, “Fascistas”, se leía en las octavillas que habían arrojado por el suelo. Albert Rivera ha llegado a mediodía al municipio del que es originario el etarra detenido el pasado 16 de mayo en los Alpes franceses para celebrar un homenaje a las víctimas del terrorismo, a 72 horas de las elecciones autonómicas, municipales y europeas de este domingo. Las farolas, los cubos de basura y otros elementos del mobiliario urbano han sido adornados con lazos amarillos como los que piden en Cataluña la libertad de los presos del procés.

Desde las 11.30, dos centenares de personas se han concentrado en la plaza. Una de las manifestantes ha explicado al grupo que debían darse la vuelta para dar la espalda a la comitiva de Ciudadanos cuando pasara y que intentaran mantenerse en silencio y no insultar. Lo han conseguido casi del todo: algunos sí han insultado a los políticos de Cs, aunque el resto les ha llamado callar.  La Ertzaintza ha dispuesto un dispositivo con tres unidades de antidisturbios.

Ciudadanos ya había denunciado a primera hora de la mañana que en el pueblo circulaban unos pasquines en los que se llamaba a cerrar las persianas de los comercios y de las viviendas y a concentrarse en la plaza del Ayuntamiento para mostrar “de modo pacífico el rechazo a sus provocaciones”, así como a salir a los balcones haciendo ruido. El Ayuntamiento de Ugao-Miraballes, a preguntas de EL PAÍS, se ha desvinculado de esa convocatoria. El Consistorio sí difundió ayer un comunicado en el que, sin citar a Ciudadanos, consideraba la convocatoria una «provocación».

«Por el momento en que se produce y a la luz de los antecedentes, constituye un irresponsable ejercicio de provocación que no persigue el fin que se anuncia, sino la alteración del normal discurrir de la vida y de la campaña electoral en el municipio», decía el texto del Ayuntamiento. En su opinión, se trata de «un indisimulado intento de generar en Ugao-Miraballes, como antes en otras localidades vascas, un clima de confrontación y el suficiente ruido mediático con el que alimentar unos intereses electorales concretos, sin tener en cuenta la tensión a la que se somete a la ciudadanía».

El presidente del PNV, Andoni Ortuzar, ha acusado al líder de Ciudadanos de ir a «montar lío» y de utilizar «una vez más de manera farisaica a las víctimas del terrorismo» para buscar «votos en España». «Señor Ortuzar: lo indigno es consentir homenajes a etarras, como hacen los nacionalistas como usted», le ha respondido Rivera.

En Ugao-Miraballes, un municipio de Vizcaya a 20 minutos de Bilbao y de poco más de 4.000 habitantes, nació Josu Ternera hace 68 años. En el Consistorio solo tienen representación el PNV y Eh Bildu, y el pasado sábado varios cientos de personas se manifestaron para pedir la libertad del etarra al que espera una causa por delitos de humanidad. Cs no se presenta a las elecciones en el municipio.

El de este jueves en el municipio vasco es el único acto fuera de Madrid que celebra el líder de Cs en la última semana de campaña de las municipales y autonómicas. Rivera ha priorizado Madrid, y apenas se ha movido en los quince días de campaña de la capital. La semana anterior solo viajó a Ávila, Zaragoza y Estella (Navarra), en este último caso en la misma «gira por la libertad» que le ha llevado hoy a Ugao-Miraballes. En la localidad navarra, un grupo simuló que desinfectaba el suelo por el que pisaron los dirigentes de Cs a su marcha. En la campaña de las generales, el partido celebró un mitin en Errenteria en medio de un clima de tensión y acoso que la Fiscalía investiga por posible delito de odio.

FUENTE: El País