Teresa Rosique, la presidenta del PSRM-PSOE, será la nueva delegada del Gobierno en Murcia, si ella quiere. De lo contrario, ocupará el cargo Francisco Jiménez, el ex jefe provincial de Tráfico y actual secretario general de la Delegación, quien seguirá en su puesto y será la mano derecha de Teresa Rosique en el supuesto de que, como resulta previsible, la veterana política cartagenera acepte el ofrecimiento que ya le ha hecho Diego Conesa. El secretario general socialista y todavía delegado del Gobierno dimitirá el próximo día 29 para dedicarse por completo a las elecciones autonómicas del 26 de mayo, en las que competirá por la presidencia de la Comunidad Autónoma con Fernando López Miras (PP), Óscar Urralburu (Podemos), Isabel Franco (Ciudadanos), Alberto Garre (Somos Región) y el candidato de Vox, aún por designar.

La fecha del 29 de marzo no responde a un capricho. Será viernes. Tocará Consejo de Ministros y, en esa reunión, una de las últimas que celebrará el Gobierno de Pedro Sánchez antes de las elecciones del 28-A, el Ejecutivo aceptará el cese de Conesa y designará al delegado o delegada del Gobierno que el propio Conesa habrá propuesto previamente a Meritxell Batet, la ministra de Política Territorial y Función Pública. A fecha de hoy, el deseo del líder socialista es que le reemplace en el despacho de Teniente Flomesta Teresa Rosique, que daría a la Delegación un perfil más político, y que siga al frente de la sala de máquinas su buen amigo Francisco Jiménez, funcionario y conocedor de todos los vericuetos administrativos.

En el caso de que Rosique no accediera a la Delegación, por una razón u otra, Diego Conesa tiene muy claro que sería el turno de Francisco Jiménez, pero la designación de Teresa Rosique encierra mucha carga simbólica. Primero, porque se trata de una mujer, y su nombramiento reafirmaría al PSOE regional en la paridad que promueve en los cargos públicos, al tiempo que acallaría las críticas al propio Conesa que todavía resuenan en los corrillos del partido desde que el Comité Regional aprobó el pasado día 9 sus candidaturas electorales, que respetaban el ‘modo cremallera’ al que los socialistas están obligados por los estatutos de la organización (hombre-mujer-hombre o bien mujer-hombre-mujer), pero dejaban fuera -en la semana del 8-M- a sus tres principales referentes feministas: Rosa Peñalver, María González Veracruz y Begoña García Retegui. La cuarta mujer histórica en la vida reciente del PSRM es Teresa Rosique.

Existe otra razón para que Diego Conesa se incline por Rosique. Ella fue, junto con Pedro Saura, el látigo y el dedo acusador de los desmanes urbanísticos del PP en la época del ladrillo, la voz que clamó, muchas veces en soledad, contra los primeros casos de corrupción bajo la égida de Valcárcel. Alcaldes de su propio partido llegaron a censurarla porque las denuncias de Rosique ponían en peligro los convenios urbanísticos de los que dependía la supervivencia financiera de sus municipios. Su ascenso a la Delegación del Gobierno sería todo un ideograma, el epítome del fin de la etapa del PP en Murcia y el recuerdo estimulante de la mejor etapa del PSOE, cuando dos mujeres socialistas gobernaban en la Región: María Antonia Martínez en el palacio de San Esteban, como primera presidenta autonómica de España, y Concepción Sáenz en la Delegación del Gobierno, ambas con mano firme y una ejecutoria breve pero impoluta y eficiente. La fuerza del mensaje que el PSOE lanzaría con el nombramiento de Rosique, tanto a su militancia como a la sociedad en su conjunto, silenciaría las críticas, residuales, de otros socialistas que no olvidan cuánto llegó a flagelar Teresa Rosique al PSOE en su etapa anterior desde las filas de Izquierda Unida.

Un día antes de que Diego Conesa cese en el cargo, vendrá a visitarlo Pedro Sánchez, en su condición de presidente del Gobierno. Puede que aproveche para reunirse también con dirigentes socialistas, pero será un viaje oficial y no como mandatario socialista. La agenda está ya cerrada para el jueves, 28, con presencia en la Federación de Empresarios del Metal (FREMM), donde Pedro Sánchez y Diego Conesa mostrarán las excelencias de la FP dual, y en el Parque Tecnológico de la Universidad de Murcia (UMU). Ciencia, investigación y tecnología serán, también, los ejes del programa del PSRM para las elecciones de mayo.

Cinco días antes, el 23, sábado, la ministra de Trabajo, Magdalena Valerio, arropará a Conesa en la presentación del prontuario económico de su programa electoral, y es posible que dé a conocer alguna mejora para los trabajadores fijos-discontinuos.

Esta es, ‘grosso modo’, la hoja de ruta de Diego Conesa hasta llegar al final de su mandato institucional, el 29 de marzo, y empezar a desbrozar ese día el camino que lo llevará hasta los comicios autonómicos del 26 de mayo, que serán en los que los socialistas se jugarán en Murcia la posibilidad de acabar con 24 años de poder del PP o seguir en el purgatorio.

 

 

FUENTE: LAVERDAD