«Después de cuatro años, doy un paso al lado sabiendo que he dado todo cuanto tenía y he dedicado todas las horas posibles del día, durante los siete días de la semana, para hacer una Región de Murcia mejor a través de un PSRM centrado en ser útil a sus 45 municipios», ha señalado Conesa en una carta dirigida a la militancia, en la que admite que este año ha sido «bastante duro» y ha sufrido «ataques furibundos, no solo políticos, también personales y familiares que superan cualquier línea roja».
A lo largo de la mañana de hoy, Conesa ha visitado la sede socialista en Ferraz donde se ha visto con varios altos cargos de la cúpula del partido, entre ellos de la secretaría de organización federal.
En esta reunión, Conesa ha anunciado que «da un paso a un lado» para seguir impulsando el partido en Murcia, según sus palabras. Al volver, le ha comunicado su decisión a la actual ejecutiva esta misma tarde.
Diego Conesa ha señalado que » he decidido que es el momento de dar un paso al lado, tomar oxígeno, respirar fuerte y coger impulso para seguir dejándome la piel y el alma en mantener, mejorar y hacer crecer el único proyecto político alternativo a la derecha corrupta y a la extrema derecha tóxica que cree que la Región es su cortijo”.
Además, asegura que tras el congreso de diciembre, se pondrá «a disposición de nuestro partido y de la nueva dirección regional».
«Los socialistas continuaremos demostrando que defendemos, sentimos y respetamos unos valores e ideales de libertad, igualdad y justicia social. Que somos el partido y la alternativa que necesita y merece nuestra Región, por nuestros jóvenes y mayores, por unos servicios públicos de calidad, que reduzca las desigualdades, especialmente entre hombres y mujeres, que luche por la recuperación del patrimonio natural y ponga a la Región de Murcia en el lugar que se merece», dice Conesa en su carta.
Conesa, que llegó a la secretaría general tras unas primarias en las que venció a María Gonzalez, se puso al frente del partido socialista murciano y consiguió la primera victoria electoral de los suyos frente al PP tras casi 30 años de hegemonía popular en la Región. Sin embargo, no pudo gobernar tras no fraguar las negociaciones con ciudadanos.
A mitad de esta legislatura, apoyado por los suyos y una parte del partido naranja trató de desbancar a los populares con una moción de censura en la que él, aunque era cabeza de lista del partido más votado, cedía la presidencia regional a la líder de Ciudadanos, Ana Martínez Vidal. La moción fracasó tras incumplir tres de los seis diputados naranjas la disciplina de voto y convertirse en consejeros del gobierno de López Miras.
En el último año también se ha tenido que enfrentar a un proceso judicial tras la denuncia del antiguo jefe de la policía local de Alhama.Conesa era llamado a declarar como imputado tras conocerse un informe de la Policía Local en el que se advertía del archivo de dos multas -en tiempos de Conesa como alcalde- «sin tener en cuenta la ratificación del agente denunciante». La fiscalía pidió el archivo del caso aunque los populares señalaron durante meses que era necesario aclarar si Conesa había prevaricado. El PSOE calificó esta denuncia de «un intento más de tapar la boca de dirigentes socialistas que no se callan ante los graves problemas de la Región de Murcia».
Javier Ruiz