Volverá Campillo a deshojar la margarita a no mucho tardar, tras unas exigentes y reñidas elecciones donde le faltó el apoyo esperado de un crucial potentado de la “logia caciquil”, entrometido en política sin reservas. Pudo conseguir in extremis arrebatar el “sillón de tersssiopelo” al grupo socialista y reeditar pactos anteriores con un “ahora sí” como si el tiempo y sus dos anteriores mandatos nunca hubiesen ocurrido. Los disparates y embolados que a sus antecesores pasaron factura de tanto piarla por querer hacerlo todo a su medida y para uso exclusivo del bipartidismo infiel y sus negocietes, el actual Regidor los convierte en rutilantes logros y avances para el municipio, basados en la participación, el compromiso ciudadano y más“municipalismo”. Esa es la cuestión y “la gran preocupación caciquil”.

Evidentemente, se produjo un dislate preelectoral con cierto Gerifalte local que mangonea el PP, que nos hizo recordar lo decisivos que pueden llegar a ser los “benefactores fácticos” y la seguridad que garantiza su apoyo. Y en C/Progreso, a mano derecha (según se va al cielo), mientras se idolatraba su nombre tras su acción salvadora, iba abriéndose un espeso e inesperado debate que podía sonar descabellado al recordar viejos fantasmas del pasado y las mociones de censura elaboradas para domesticar díscolos caudillos surgidos de los clanes dominantes del partido conservador más siniestro, que iban a ser la esperanza blanca popular. Sabido es por todos que las poderosas “famiglias”del régimen, ponen huevos en los cestos de todos los partidos, y aunque disimulen al cambiarlos de color y cesto el plumero se les ve demasiado.

UIDM, debe dar otro golpe de efecto que le sirva para creer que puede conseguir lo imposible. En un contexto electoral muy complicado acabó logrando un gran éxito que ahora disfruta. Tiene que cuidarlo y consolidarlo, para seguir aspirando a repetirlo con mayoría, porque todo lo que no sea ganar en el futuro, le complicaría las cosas de manera casi decisiva, teniendo en cuenta que repetir con un PSOE enrabietado del que se teme lo peor, será muy complejo. Y a buen entendedor… no hace falta decir nada más. Pero más allá de las suspicacias históricas con las posibles nuevas apariciones que el aparato sociata saque de la chistera, lo que más preocupa al grupo independiente, consciente de lo que se va a jugar en lo que queda de legislatura, es mantener su prestigio como partido estable y conciliador sin señalarse por entrar en disputas por el botín.

El Partido Popular empieza ya a ver a la vuelta de la esquina el objetivo de recuperar el poder. Tan cerca parece estar, como tan lejos puede colocarse en caso de perder los siguientes duelos que le esperan, entre rivales directos del propio conciliábulo ya mismo, y a renglón seguido poder aguantar el pulso al líder independiente, quien todavía deshoja la margarita azul que le permitiría encarar su futuro con más calma y sin tanta presión de cara a las próximas elecciones. De momento, las cuentas le salen al PP, que probablemente tendrá la oportunidad de dar un golpe de timón a su favor y volver a gobernar. Y no quieren dejarla pasar, porque el grupo popular y los que mueven los hilos aspiran a recuperar el poder, pero en San Esteban saben que, o cambian la jefatura local o seguirán en la oposición por mucho tiempo.

Llegado el caso, llevaría casi dos décadas el mismo “triunvirato” pepero al frente del partido, disfrutando y utilizando todo este tiempo de la hegemonía regional a su antojo. Son ambiciosos e intentarán choques temerarios que ya provocan, peleando por ganar y mantener su estatus privilegiado y el de su clan hasta el final, cuando empiece la previa electoral que va con demasiada prisa. Pero UIDM le aguanta el pulso y espera sellar su cuarto billete a la alcaldía, el tercero seguido y hacer historia, ya que nunca se ha logrado aquí. Saben que todos los partidos pelean por ganar y lo complicado que es para un partido independiente mantenerse en el poder tres legislaturas. Consideran que si finalizan esta sería una grandísima hazaña que les abriría nuevos horizontes y posibilidades, ya que el PP, no tiene ningún proyecto y depende de como se levanten, por dónde les dé el aire y está rodeado de un claque descocado, un grupo de aplaudidores profesionales a los que el “excelso prócer” del partido comunica por teléfono lo que tienen que hacer. 

 

POST SCRIPTUM: “Cuando reflexiono sobre todos estos asuntos, reconozco que es mucho más gratificante llegar a la cima de la montaña y compartir la experiencia con otros, que llegar solo, exhausto y olvidado”.

 

COLECTIVO “EN CLAVE TRANSPARENTE”