El acoso y abandono al que están siendo sometidos los agentes de la Guardia Civil y de la Policía Nacional destacados en Cataluña para hacer frente al desafío separatista hay que añadir el agravio comparativo al que estos profesionales tienen que hacer frente cuando se comparan sus sueldos con los de los Mossos d’Esquadra o con la Ertzaintza. Los incidentes registrados en Cataluña durante el despliegue ordenado por el Tribunal Superior de Justicia para que se evitara la celebración de un referéndum declarado ilegal han vuelto a poner de manifiesto la importante labor que desempeñan los Cuerpos nacionales. Basta un vistazo a la tabla de salarios de los cuerpos para darse cuenta de hasta qué punto están justificadas las demandas de las agrupaciones profesionales de la Policía y de la Guardia Civil para que se equiparen los sueldos con otros cuerpos.

Por ejemplo, un capitán de la Guardia Civil cobra 42.033 euros anuales, cinco mil más que un inspector de la Policía Nacional, que tiene un sueldo de 36.990 euros anuales. Sin embargo, el sueldo que cobra un «Comisari base» de los Mossos asciende a 65.005 euros, es decir, 23.000 euros más que el capitán de la Guardia Civil y 28.000 más que el inspector de Policía. Este desajuste se puede observar a lo largo de toda la escala de mandos de estos cuerpos de seguridad. Especialmente sangrante es comparar los salarios en lo más bajo del escalafón. Miembros de la Benemérita y de la Policía Nacional cobran 24.500 mientras que un mosso nivel 1 percibe 35.337 euros anuales; es decir, más de 10.000 euros más. Y eso, a pesar de que es Interior el que paga directamente las nóminas de los Mossos. Es decir, al día un policía nacional y un guardia civil cobran unos 67 euros frente a los 96 que percibe un mosso. Es decir, 900 euros al mes, dado que el sueldo anual dividido en 14 pagas y restando el 12% de IRPF da algo más de1.500 al mes para guardias civiles y policías mientras que el del mosso es de 2.400.

 

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Se trata de una demanda que se viene reclamando desde hace muchos años. De hecho, antes de que Ciudadanos pidiese la equiparación salarial, en 2008, el PP, estando en la oposición, reclamó que esta justicia salarial se tuviera en cuenta en los Presupuestos Generales del Estado de 2009. Y no sólo no se tuvo en cuenta, sino que desde entonces es más que notoria la pérdida adquisitiva que han ido sufriendo por los ajustes presupuestarios. Así, en 2010 el Gobierno del PSOE recortó el sueldo de los funcionarios públicos un 5%, congelándolo después en 2011. En 2012, el PP quitó la paga extraordinaria que finalmente se recuperó por fases. Los recortes continuaron. De hecho, aunque en 2016 se terminó la congelación salarial, sólo se subió un 1% el suelo, lo que hizo que el poder adquisitivo que sufrieron los funcionarios alcanzase más de un 12% de media entre 2010 y 2015. En 2017, se subió un 1% el sueldo, pero no se hizo efectivo hasta la nómina de julio. Este ajuste salarial sufrido a lo largo de la crisis se enmarca en los del conjunto de la función pública, pero el caso de policías y guardias civiles se da la circunstancia de que la situación de partida era peor al percibir unos sueldos por debajo de los de otros profesionales de la seguridad pública.

«No sólo tenemos más competencias, mayor movilidad geográfica, más objetivos, argumentos para cobrar al menos como el resto de cuerpos, sino que el problema viene cuando nos jubilamos. Cotizamos por nuestro sueldo base, 720 euros más trienio, y el resto por complementos que tributan pero no cotizan, por lo que nos jubilamos con 1.200-1.300 euros, mientras que un mosso, en el peor de los casos, se jubila con 2.000, y eso el que menos», aseguró Ramón Cosio, portavoz del SUP.

La reivindicación también la promueven el resto de sindicatos policiales (UFP, SSP, CEP y ASP), así como las agrupaciones de la Guardia Civil: AEGC, UnionGC. «No consideramos justo que las policías autonómicas perciban un sueldo mayor. La Guardia Civil y la Policía tienen mayores competencias. Como mínimo deberíamos cobrar lo mismo», afirmó Francisco Javier Benito, presidente nacional de AEGC. «Es cierto que los sueldos de los mossos o ertzainas son competencia de las comunidades autónomas, pero hay que tener en cuenta que el 80% del mismo sale directamente del propio estado, también es cierto que en otras competencia transferidas, como la educación o sanidad, las diferencias entre los profesionales entre los distintos territorios de España o entre los distintos cuerpos de funcionarios no son tan abultadas como ocurre con los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado y sus homólogos en las comunidades autónomas. Pero es que incluso, muchos policías locales cobran bastantes más que un policía nacional o guardia civil. Es cierto, que dependen de las ciudadades y en las pequeñas localidades con poca población sus sueldos medios son de 1.000 euros, pero en grandes ciudades es habitual que un policía local cobre de media 2.000 euros», añade. Además, tal y como publicó el Diari Oficial de la Generalitat de Cataluña (DOGC) este verano en clara preparación del tramo final del desafío independentista, la Generalitat llegó a un acuerdo entre el Departamento de Interior catalán y las organizaciones sindicales representativas del cuerpo de Mossos d’Esquadra, el Ejecutivo de Puigdemont llevaría a cabo un aumento de sueldo de 300 euros a esta policía autonómica.

 

Fotos de la manifestación policial del pasado 6 de Octubre en Madrid

 

 

FUENTE: LARAZON