En estos momentos en los que Galicia vive horas críticas, la oposición ha recordado una instantánea del año 2006 en la que Alberto Núñez Feijóo se encuentra sosteniendo una manguera para sofocar un fuego que se acercaba a una casa en Cabeza de Boi (aldea del concello de Meis), en Pontevedra. En aquella época Feijóo era jefe de la oposición y se sirvió de ella para criticar con dureza al bipartito que llevaba en 2006 las riendas de la autonomía gallega (PSdeG y BNG) y, también al Gobierno central de José Luis Rodríguez Zapatero.
Feijóo acudió a la localidad pontevedresa ataviado con una camisa y pantalones vaqueros, lo cual provocó que la instantánea circulara rápidamente por todos medios de comunicación (años más tarde, él mismo reconoció haberse equivocado al aceptar tal ofrecimiento). En aquellos momentos y aprovechando la presencia de los medios, Feijóo afirmó: “Esto es una experiencia de la que hay que aprender, estas cosas hay que evitar que se vuelvan a repetir, hay que hacer fórmulas de coordinación y selección más razonables, trabajar y decirle a los alcaldes que estén con la gente y que vamos a valorar sus bienes e intentar que se le indemnice por todas sus pérdidas, y pedir a las autoridades que por lo menos blinden sus casas», concluyó.
Feijóo, poco antes de elecciones municipales de 2007, llegó a afirmar que: «con nosotros no moría gente en los incendios, y con ellos, cuatro personas», refiriéndose con el «ellos» al Gobierno bipartito y utilizando a las víctimas del fuego como argumento político.
En esa misma línea, el Partido Popular demandó conocer «cuánto de lo quemado se debe a los pirómanos y cuánto a la imprevisión, indolencia e irresponsabilidad del Gobierno» y Mariano Rajoy anunció que su partido sí pediría responsabilidades políticas. «Muchas de las cosas que se han hecho han demostrado que hay quién no sabe gobernar, y la obligación básica de un gobernante es ser eficaz y saber gobernar cuando hay problemas», dijo.
Lejos de aquella declaración, en la comparecencia celebrada este lunes Feijóo ha defendido que “nunca hubo tantos medios en un mes de octubre, el doble que cualquier otro octubre” a pesar de que hace quince días despidió a 436 brigadistas contratados durante el verano.
FUENTE: PUBLICO
