Desplome del PP, que se sitúa como el último partido nacional, y una mayoría absoluta de la izquierda. El último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) adelanta que el PSOE aumenta en intención de voto de cara a las próximas elecciones y consigue casi un tercio de los apoyos totales (29,9%), frente a un Partido Popular que obtiene la mitad, con un 14,9%. Entre los datos ofrecidos por la institución, destaca la posición del los populares, que quedan en cuarta posición por detrás de Ciudadanos (17,7%) y Unidos Podemos (15,4%).
El partido Vox es junto a Unidos Podemos y al PSOE uno de los mayores beneficiados por la encuesta. Los de Santiago Abascal vuelven a mejorar sus resultados respecto al barómetro de diciembre y duplica sus apoyos, con un 6,5% frente al 3,7% de hace un mes. Junto a Vox, los partidos que mejoran su perspectiva electoral son el PSOE (+1 respecto a diciembre) y Unidos Podemos ( +0,3), mientras que el PP pierde un quinto de sus apoyos (-4,2) y Ciudadanos desciende ligeramente (-0,2).
La suma de PSOE, Podemos y ERC da exactamente un 50% de los apoyos
El barómetro también ofrece un marco de alianzas favorable para la izquierda. El CIS de enero [consulte aquí el barómetro], realizado en los primeros días del mes, otorga una mayoría casi absoluta a la suma entre PSOE y Unidos Podemos, que obtendrían un 45,3% de los apoyos. Si a esto se le suma el 4,3% de ERC, el resultado sería una mayoría absoluta perfecta del 50%. Además, la encuesta enfría la alianza a la andaluza, puesto que el derrumbe del PP hace que el pacto con Ciudadanos y Vox alcance un 39,1%, muy lejos de la suma de las izquierdas.
El método de realización de la encuesta, implantado por presidente del CIS, el socialista José Félix Tezanos, ha cambiado la fórmula habitual aplicada en democracia. El dirigente suprimió cualquier tratamiento de los datos -la llamada cocina– y sólo tiene en cuenta la respuesta de los encuestados y la simpatía hacia los partidos, sin considerar otros factores como el recuerdo de voto como se hacía hasta el momento. Esta fórmula tiende a favorecer tradicionalmente al PSOE y podría perjudicar a formaciones como Vox y PP, ante la reticencias de los encuestados a desvelar su simpatía hacia estas fuerzas.
Este mismo miércoles, Tezanos defendió en el Congreso su decisión de eliminar de sus encuestas las estimaciones de voto, la denominada ‘cocina’, pues considera que, desde 2015, cuando acabó el bipartidismo y los españoles empezaron a mostrar una mayor variación de voto, “los pronósticos son complejos” y las proyecciones “no valen”.
