Ocho personas han perdido la vida en Nueva York y más de una docena han resultado heridas tras la invasión de un carril bici por parte de una furgoneta en la zona del lower Manhattan, cerca de la orilla del río Hudson, según ha confirmado el alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, en una rueda de prensa.
El conductor es un hombre de 29 años, identificado por la policía como Sayfullo Saipov, y ha resultado herido por los disparos de la policía. Ha sido hospitalizado y se encuentra bajo custodia de las fuerzas de seguridad.
El vehículo, una furgoneta alquilada de la cadena de grandes almacenes de bricolaje Home Depot, chocó posteriormente con un autobús escolar del cercano instituto Stuyvesant.
El FBI ha señalado que está investigando el suceso como un atentado terrorista. Según indican fuentes de la investigación al diario The New York Times, el hombre gritó «Allahu akbar» (Alá es grande) tras cometer el ataque y los agentes han hallado una nota escrita a mano cerca de la furgoneta en la que se muestra lealtad al ISIS. El periódico indica, según fuentes de la lucha antiterrorista, que aún no se han hallado vínculos de Sayfullo Saipov con el grupo terrorista y se investiga lo sucedido como un ataque «inspirado» en los protagonizados por el ISIS.
Sayfullo Saipov es originario de Uzbekistán y reside en Estados Unidos desde 2010, informan medios locales. En la actualidad, vivía en Paterson y era conductor de Uber.
La policía, a través de su perfil de Twitter, informó de que un vehículo había entrado al carril bici de West Street. La furgoneta ha golpeado «a múltiples personas», según las mismas fuentes: «Hay varias víctimas mortales y numerosas personas heridas». «El vehículo continuó golpeando otro vehículo. El sospechoso abandonó su vehículo mostrando armas de fuego de imitación y la policía de Nueva York le disparó. El sospechoso permanece bajo custodia policial», concluye su relato la policía.
De las ocho víctimas mortales, cinco son ciudadanos argentinos, han informado las autoridades del país latinoamericano. Los fallecidos, ya identificados, estaban de viaje en Nueva York para celebrar 30 años de la graduación de sus estudios de secundaria. Varias personas de este grupo figuran entre los heridos por el ataque.
Otro de los fallecidos y tres heridos son de nacionalidad belga, según han confirmado también las autoridades del país.
Una ciudad puesta a prueba
En su comparecencia, de Blasio ha señalado que este ataque «especialmente cobarde» busca «poner a prueba» a la ciudad y ha afirmado que los neoyorquinos han demostrado su capacidad de resiliencia ante semejantes sucesos. El alcalde ha recordado que este ataque se ha producido muy cerca del lugar en el que se erigían las torres gemelas. Se trata del peor atentado en la ciudad de Nueva York desde el 11-S.
Por su parte, el Gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, ha afirmado que este ataque se produce porque la ciudad es un símbolo mundial de libertad y democracia. «Eso es lo que somos», ha enfatizado Cuomo.
