EN ESTE CASO AL PRESIDENTE DEL PP MAZARRONERO
Lo he escrito en su digital preferido, M.T. net. Y también, en La Voz su diario de siempre. Usted ha dicho, como su «cuñadisimo» sentenció antaño que: «Lo perdonaré todo o casi todo, pero el daño a mi familia “NO LO VOY A OLVIDAR JAMÁS». Esta frase merece una reflexión imparcial y analítica porque juega con sus emociones y con las de los mazarroneros. Ya se sabe que las gentes de pueblo incluso votamos más con el corazón que con la cabeza. Otros, con la cartera, rompiendo sacos de ambiciones nada claras. Le explico.
La búsqueda de la verdad siempre produce daños colaterales en el ejercicio del Derecho, y en la política, más. En el incomodo caso CAMPOSOL usted sabe, ex concejal de urbanismo, presidente del PP y ex alcalde en la sombra hasta hace unos días del ANTRO INSTITUCIONAL, se debe llegar hasta el final y descubrir la verdad ocultada, aunque le duela y se le estreche el orificio trasero, es bueno para la salud democrática que sean investigados todos los hechos y latrocinios, con rigor e imparcialidad. También será bueno para el Partido Popular de los 20 militantes al día de cuotas, hoy propiedad de una aparente sociedad anónima, presidida por vos y un grupo reducido de socios. Y será muy bueno para todos los que integramos este maltratado municipio. La Fiscalía y los jueces están empleando, dicen, infinidad de medios para llegar a la verdad, desentrañar el montaje o descubrir errores de bulto que se suceden en demasía que claman justicia. La madeja del ovillo de la corrupción, me refiero a la veintena de casos por deshacer, es un deber y una necesidad en un Estado de Derecho que ampara a un pueblo muy golpeado que no entiende la impunidad que disfrutan los componentes de uno y otro cartel político-económico.
El adulterado caso que ensombrece al pueblo, este más que otros señor presidente, es un asunto que ha levantado una tormenta informativa que en nada nos favorece. La imagen de toda la Región está por los suelos, la opacidad institucional nos afecta, porque sistemáticamente las malas noticias nos castigan. La mordida a la brasileña que impusieron, una anécdota, se ha convertido en categoría, y se mantiene. Urge una limpieza profunda. Esta situación es intolerable, esta trama es injusta y nos avergüenza, cuando Mazarrón es un tesoro de humanidad y riqueza que no han sabido administrar.
Pero si hay un juicio paralelo en la calle, en la política de los partidos también retumba una música estridente, tratando de destruirse recíprocamente en choques inadmisibles en una democracia decente que por aquí sigue moribunda y que estas banderías de politiqueros sin principios pretenden enterrar.
El prolongado show de los dirigentes de los cuatro partidos que conforman el coctel de intereses en una explosiva mezcla «a la mazarronera», nos perjudica notablemente, y es por ello que nuestro pueblo vive instalado en la duda. Se duda de todo lo que rodea la vida política y sus circunstancias, como la justicia y la honestidad pública. Es cierto que su familia y allegados deben estar pasándolo mal. Es lógico. Aunque lo dudo, “palos con gusto no duelen”. Personalmente, cuando bajo sus sectarios mandatos se ultrajaron todos mis proyectos, sufrí los embates del resentimiento, figúrese usted un «broker assicurativo» ejercitándose en subastas cómo están sufriendo decenas de miles de familias víctimas de la ineptitud manifiesta de los que como usted cobran muy aceptables sueldos que salen de nuestros bolsillos, vuestros empresarios, votando en las urnas. Algunas de nuestras esperanzas, por no decir todas, parecen ahora utopías y desengaños sin remisión, porque no vemos salidas por donde entre aire fresco y proyectos rentables y no sueños inalcanzables fabricados por un lobby de corte siciliano a la fuga con acompañamiento de medios informativos que siembran la confusión y la desinformación.
Estamos viviendo en permanente estado de intoxicación que se paga con creces. Ahí está para nuestra indignación su evidente nexo con la trama PÚNICA, en la que hay cargos regionales relevantes implicados. Usted lo sabe con detalle. Hasta aquí han llegado sus viciados negocietes y pretorianos de la «cosa nostra».
Usted señor presidente del PARTIDO POPULAR y, por qué no, posible alcaldable, debe aplaudir que la Justicia rule sin problemas, que ellos ya tienen suficientes presiones externas e internas de sus jefes regionales y rece porque “NO hagan lo mejor posible su delicado trabajo”, sin confidencias sutiles. Ni apoyos sustantivos ni adjetivos.
Y le digo más. Nunca, nunca, pero nunca debió dejarse seducir por los brujos y el golfo mayor del Sanedrín, que dejaron una herencia quebrada, una cadena de imputados, saqueos calculados, un pueblo a la cola del resto de la región y un partido repartido en partes desiguales. Usted llegó a la Presidencia por la vía del dedazo prepotente e hicieron daño, político y así mismo humano, no se olvide de los caídos del otro bando ni de otras personas y familias de bien demostrado.
Sabía lo que le tocaba, incluyendo una Oposición maniatada y unos compinches de gobernanza con alto nivel de indecencia política que tenían y tienen prisas por tocar poder, y no le aceptan por consideraciones éticas, dicen.
A la señora Regidora, supongo, le cegó la ambición y también se equivocó con unas prisas sorprendentes por el trono, aunque no extrañas para los ciudadanos. No nos vengan con palabras bonitas como que juntos han hecho un esfuerzo por Mazarrón y que tampoco sabía lo que olía y no precisamente a rosas. No, la ahora Alcaldesa, antes concejala y consejera, sabía o debía saber lo que se le venía encima posteriormente, hasta ahora mismo. La crisis institucional no se ha parado, ni se parará, ni vamos a olvidar, porque su equipo y gabinete nos mintieron antes y ahora contándonos cuentos chinos, y el aprendiz de chef que maneja el puchero mazarronero y regalaba y premiaba a sus manseados secuaces, con ese buenismo caciquil tradicional de la tierra, tierra quemada por el vicio y las mafias de los blanqueos. Marca de la casa, hasta quemando a sus delfines. Uno a uno, con la aprobación de su gran protector, el “encantador de serpientes” del Sanedrín Fáctico. Ignoro, aunque supongo por qué secretas circunstancias, quizás sea una nueva forma de hacer arte político.
La situación por la que atraviesa Mazarrón y la ciudadanía es delicada, a pesar de que se intente ocultar machacando con mensajes de doble lenguaje, y los procedimientos judiciales no vayan al ritmo deseable. Hasta fíjese señor “ex consiglieri popular”, muy pronto le daré datos inquietantes que llegarán a los servidores de la ley y el orden. No lo dude.
No obstante todo ello, confío en que la capacidad del elemento humano termine sacándonos del pozo negro, aunque mi confianza tiene algunos detalles de dudas, porque la pasividad popular o el aburrimiento y la desgana nos ha convertido en un pueblo harto de tragarse todos los días lo que le echen. Vivimos en los límites de la impotencia y el déficit democrático. Ni siquiera se ponen de acuerdo en los Plenos, hechos para el diálogo y el encuentro. Todos tal para cual, lo que es una desgracia. No son capaces de pactar un acuerdo natural que eleve a Mazarrón a la altura que le corresponde por su historia y valores de alto estilo. Se imponen intereses personales y de partidos por encima de los ya escasos cuarenta mil buenos ciudadanos y ciudadanas.
Ni me imagino, con el debido respeto a sus señorías, a usted ni a ninguno del pervertido «gabinete», dirigiendo otra legislatura la «Cueva de las Gangas»como producto de un negocio consensuado a espaldas de las necesidades que nos acosan. Solo un ataque de insensatez de los muevehilos haría que el pueblo siga gobernado por alguien de su camarilla o del actual «EQUIPO DE DESGOBIERNO», con firme promesa de una falsa regeneración que ya nadie cree, ni los partidarios más optimistas del «régimen clientelista» que los beneficiados clanes sostienen.
Mi pésame, señor presidente Popular, por su embadurnada y premeditada salida, y por su posible vuelta en olor de multitudes si se le ocurre. «TOQUEMOS MADERA»
HEMEROTECA: Laberinto de pasiones en Mazarrón
(10/06/2015)
En demasiadas ocasiones y durante prolongados periodos de tiempo, la vida de un líder llamado a ocupar el trono de la «Cueva de lasGangas» es un indiscreto juego de naipes instruido y melancólico, que requiere descaro e imaginación y ocupar el lugar idóneo en el envite para diseñar un plan que esquive el de los adversarios.
A veces, no obstante, es mejor arriesgarse con un golpe decisivo de autoridad repentino sobre el tapete, para marcarse un farol impredecible y decisivo que anule las estrategias contrarias. No hay nada más aterrador. Por ello nos dan tanto temor nuestros gobernantes : No sabemos cuándo, cómo ni por qué, actuarán. En un elaborado y pervertido juego político, es el efecto que tiene sobre los ciudadanos un comportamiento intrigante, imprevisible y espesado para conspirar.
Sabido y cierto es que en Mazarrón, todos los Alcaldes electos han tenido la peculiaridad de alterar su comportamiento al ocupar el sillón consistorial (maldito sillón), de improvisar y exceder el peso de la rutina y las malas costumbres. Pero ninguno de ellos han utilizado ese poder para cambiar los solapados moldes del pasado. Todos han preferido el impasible «acomodo rabanero» del laberíntico «régimen clientelísta», de entregarse apasionados a las directríces impuestas por el «Sanedrín fáctico» que les hace repetir los mismos «trajínes agiotístas» sin rechistar.
Es primordial y necesario que la futura Alcaldesa tome buena nota de ello, y que tras el triunfo electoral cosechado al frente de una candidatura incipiente e inconclusa en la que puede titubear en los tramos más incomodos y decisivos de la legislatura, no se le note tan incómoda con la gente y al margen de las intrincadas negociaciones por el reparto de poder. Poco se le puede reprochar de momento a la dirigente popular, que ha estado siempre al frente de su equipo en toda la campaña, pero es evidente que hay detalles que de una vez por todas tienen que cambiar. Alguien la tiene que convencer (quien manda aquí o el que venga de Murcia), que aumentar y dejar ver el cautivo nexo con los » insaciables jerifaltes» para consolidar su curriculún político está muy bien, pero que está entrando en un momento de su carrera en el que tiene que empezar a dosificar riesgos intransitables, tomar decisiones incorruptibles y a distinguir el «polvo de la paja». Una vez apartados los ases y comodines «marcados» de la timba , «HAY QUE SER DELIBERADAMENTE IMPREDECIBLE «.
POSTS SCRIPTUM : » Muchos gobernantes ven por los ojos de los «jalabolas» que les informan, como los cerdos a través del olfato «.
