La presidenta cuenta con una guardia de corps, con un círculo íntimo con el que consulta sus decisiones, que está formada por ocho hombres
Las feministas más moderadas defienden que una de las claves de la igualdad es que las mujeres estén en los centros de toma de decisiones. Las leyes de igualdad, los planes para evitar la brecha salarial y las manifestaciones públicas ayudan a este objetivo pero no son suficientes si las féminas no llegan hasta los puestos directivos.
El Gobierno andaluz está presidido por una mujer que, además, hace suya la causa feminista y defiende públicamente los mensajes igualitarios. Sin embargo, resulta revelador bucear en quiénes componen el puente de mando del Ejecutivo regional porque en el círculo íntimo de Susana Díaz, en el núcleo reducido en el que toma las decisiones no hay ni una sola mujer, está compuesto por ocho hombres entre los que reparte las diferentes áreas de gestión.
Y no se trata tampoco de que Susana Díaz oculte en quiénes deposita sobre todo su confianza. Todo lo contrario. Es habitual verla en el Parlamento rodeada por sus principales colaboradores y el pasado lunes, cuando anunció el adelanto electoral, estuvo rodeada por este puente de mando que ocupó la primera fila de la sala donde compareció ante los medios.
Por cierto que resultó llamativa la ausencia de Mario Jiménez, portavoz del PSOE en el Parlamento andaluz, y quien está también en este círculo de confianza. Cierto es que se trató de un acto del Gobierno andaluz pero también estuvo presente el número dos del PSOE, Juan Cornejo, quien tampoco forma parte de los cargos institucionales.
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