¿Está pensando Mariano Rajoy en dimitir? El presidente del Gobierno está en el momento más débil de su carrera política debido a la sentencia judicial de la ‘Gürtel’, conocida la semana pasada, que declara probada la caja b del Partido Popular y señala que no se cree lo que dijo ante la Audiencia Nacional cuando negó esa contabilidad paralela. Los líderes de la oposición han puesto pie en pared y avisan al político gallego que no puede seguir en la Moncloa. Este jueves se debatirá la moción de censura del PSOE, pero si no saliera adelante después pueden llegar más de Podemos y Ciudadanos.

El propio presidente ha dicho este miércoles por la mañana en el Congreso que no piensa dimitir. Sus principales colaboradores en el Gobierno y en el PP también lo niegan. Pero en todo caso es una opción de la que el jefe del Ejecutivo dispone si cree que el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, va a ganar la moción de censura. Rajoy no puede ya convocar elecciones generales, porque el reglamento se lo prohíbe al estar en marcha esa iniciativa parlamentaria en su contra, pero sí puede apretar el botón rojo de la dimisión en cualquier momento antes de que se produzca la votación, que llegará como pronto el viernes al mediodía. Con su abandono, la moción de censura decaería. El dirigente gallego evitaría de esa manera ser el primer presidente tumbado por la oposición (aunque sería el primero dimitido a raíz de un caso de corrupción) y frenaría (al menos momentáneamente) la llegada de Sánchez a la Moncloa.

Si Rajoy dimitiera, todo el Gobierno caería con él y todo el Gobierno quedaría en funciones, según el artículo 101 de la Constitución. ¿Seguiría Rajoy en su escaño o abandonaría la política totalmente? Es otra incógnita. El único antecedente es el de Adolfo Suárez y él se quedó hasta la nueva investidura (de Leopoldo Calvo Sotelo), tal como se recuerda en las famosas imágenes del 23-F.

Ronda del jefe del Estado

Tras esa hipotética dimisión, el rey Felipe VI debería iniciar una ronda de consultas con todos los grupos y el jefe del Estado designaría a un candidato a la presidencia que debería presentarse a un debate de investidura. En esa conversaciones con el Monarca, el PP (al igual que todos los grupos) podría plantear nombres de diputados, como, por ejemplo, el de la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, o la presidenta del Congreso, Ana Pastor, o también de personas de fuera de la Cámara, ya que no es necesario tener escaño para ser presidente del Gobierno.

En todo caso, los números de los diputados de unos y otros siguen siendo los mismos y la situación tan endiablada como lo fue al inicio de la legislatura, cuando Rajoy necesitó la abstención de 68 diputados del PSOE para salir investido.

 

 

FUENTE: ELPERIODICO