Albert Rivera ha aterrizado en plenas fallas en la Comunidad Valenciana para fortalecer su organización. El líder de Ciudadanos ha pasado este jueves y viernes en la región con una agenda muy apretada: un encuentro ciudadano, reuniones tanto con el alcalde de Valencia, Joan Ribó, como con su grupo de municipal y presencia de la mascletà desde el balcón del Ayuntamiento. Pero no es ni casual ni de extrañar este desembarco tras las últimas encuestas en las que los resultados devuelven a la derecha la alcaldía de Valencia y la Generalitat. Superando Ciudadanos al Partido Popular en votos.
De hecho, Rivera ha confirmado durante su estancia en Valencia las buenas expectativas del partido sobre las elecciones de 2019: «Ahí están las encuestas que nos sitúan como posibles ganadores en la ciudad de Valencia y la ciudad de Alicante y con una subida muy fuerte en la Comunidad. Y por tanto, lo que espero es que Ciudadanos pueda gobernar en un futuro en la ciudad de Valencia, Alicante, Castellón y la Comunidad». Además, en Valencia podrían aprovechar las flaquezas del PP para ganar la hegemonía de la derecha: corrupción, frentes abiertos judiciales y una larga lista de conservadores valencianos imputados.
A pesar del despliegue, la formación naranja aún no tiene confirmadas las cabeceras de las listas municipales y autonómicas a las esperas de unas primarias, aunque todo parece apuntar a que seráFernando Giner la propuesta para la Alcaldía de Valencia y Toni Cantó de la Generalitat. Sin embargo, Rivera ha quedado claro a los medios de comunicación este viernes que hay que esperar a las primarias para conocer los candidatos.
Lo que sí ha afirmado es que su partido tiene la «labor» de limpiar la imagen de la Comunidad Valenciana que «no se merece volver a ser noticia porque el señor Camps vuelva a estar implicado en la caja B del PP». Rivera hizo estas declaraciones el pasado jueves en Castellón, durante un encuentro ciudadano con más de 600 personas. Rivera se ha referido con esto a la incorporación al sumario de la causa sobre la supuesta financiación ilegal del PP de la declaración que hizo el ex secretario general del PPCV, Ricardo Costa, en el juicio de la trama Gürtel de esa Comunidad implicando al expresidente de la Generalitat, Francisco Camps.
Las flaquezas del PP en la Comunitat Valenciana
El posible ‘sorpasso’ de Ciudadanos al PP en la Generalitat y en las principales ciudadas valencianas puede tener parte de causa en la financiación ilegal de los conservadores. En las elecciones de 2015, el PP perdió el liderazgo de la Generalitat tras veinte años en los que habían llegado a resultados electorales históricos en la región con Francisco Camps en 2007: 1,27 millones de votos en las autonómicas.
Pero, una década después, los casos de corrupción parecen que están pasando factura con varias causas judiciales abiertas entre los que fueron los líderes valencianos. El caso Gürtel está levantando toda una trama de presunta financiación ilegal de la formación regional que parece no tener final. Las declaraciones prestadas por el cabecilla de la trama Gürtel Francisco Correa, el empresario Álvaro Pérez ‘El Bigotes’, Pablo Crespo y el ex secretario general del PP de la Comunidad Valenciana Ricardo Costa están señalando al que fue presidente de la Generalitat, Francisco Camps.
El Ayuntamiento de Valencia tampoco presenta un frente muy limpio. Por la trauma Taula, 9 de 10 concejales del PP valenciano han sido imputados por delito de blanqueo en las elecciones de mayo de 2015. Investigados junto con otros seis exconcejales, 20 asesores y antiguos trabajadores del partido en el consistorio. Rita Barberá, que dirigió durante 24 años consecutivos en Ayuntamiento de la capital, también estaba relacionada con numerosos casos de corrupción que hasta su fallecimiento había logrado sortear.
Más allá de estos dos casos más conocidos, el calvario judicial del PP valenciano suma una amplia lista que, en algunos casos, ya se han saldado con penas de prisión. Carlos Fabra, Rafael Blasco, Pedro Hernández Mateo o Milagrosa Martínez forman parte de esa lista de altos cargos condenados con cárcel.
FUENTE: PUBLICO
