Pedro Sánchez estaba convencido, hace apenas unos días, de que había dado un paso clave para garantizar la legislatura: el visto bueno de Bruselas para flexibilizar el objetivo de déficit, que abría el camino al Gobierno para pactar con sus socios el techo de gasto. Sin embargo, el escenario ha cambiado drásticamente este fin de semana. El presidente ya no las tiene todas consigo.

Según cuentan al Confidencial Digital fuentes gubernamentales, “el viernes, tras el Consejo de Ministros, había una foto sobre la legislatura que ahora es totalmente distinta”. La llegada de Pablo Casado a la presidencia del PP, y los cambios en la ejecutiva del PDeCAT han provocado que, a día de hoy, en Moncloa no tenga claro que vaya a lograr la aprobación del techo de gasto.

En principio, el PP se abstendría en el Senado, si era aprobado en el Congreso, con lo que el techo de gasto saldría adelante, y con ello el Gobierno daría el primer paso para presentar los Presupuestos de 2019, pactarlos con los socios y blindar el Gobierno hasta 2020.

Sin embargo, las cosas han cambiado: «A día de hoy todo está en el aire”, dicen las fuentes citadas.

Los cambios de PP y PDeCAT

El cambio tiene que ver con los congresos celebrados, este fin de semana, por el PP y por el PDeCAT, según reconocen en Moncloa y en Ferraz.

La posición del Partido Popular respecto al techo de gasto era “decir no” en el Congreso para permitir que salieran adelante y absteniéndose en el Senado, tal y como se publicó en estas páginas. Pero la llegada de Pablo Casado a la presidencia del PP ha cambiado radicalmente el escenario: “La nueva estrategia del PP es decirnos tres veces ‘no’, durante la tramitación en las dos Cámaras”.

El Gobierno podría sacar adelante el techo de gasto, devolviendo la propuesta al Congreso para ratificarla allí definitivamente, pero “el problema ahora es que no tenemos garantizado el respaldo en la primera votación” en la Cámara Baja, dicen las fuentes consultadas.

Desde el Ejecutivo reconocen que el cambio de dirección en el PDeCAT, con la victoria de David Bonvehí, afín a Carles Puigdemont, frente a Marta Pascal, “marca un antes y un después en las negociaciones en el Congreso”. Ahora el apoyo de los antiguos convergentes al techo de gasto “está en el alero”.

Le puede pasar lo mismo que a Rajoy

Las fuentes consultadas por ECD explican que existía “gran sintonía” entre Sánchez y Pascal. Una sintonía que, entre otras cosas, blindó el respaldo del PDeCAT a la moción de censura, y con ello logró que el PNV también se sumara a la propuesta de hacer caer al Gobierno de Mariano Rajoy. Ahora, con el dúo Bonvehí-Puigdemont, “puede pasar lo mismo… pero al revés”. Es decir, echar abajo a Pedro Sánchez.

La nueva dirección del Partido Demócrata Catalán ha dado instrucciones a sus diputados en el Congreso para que prioricen la “agenda soberanista” a la negociación con el Ejecutivo central. Una orden que compromete cualquier acuerdo con los parlamentarios nacionalistas.

Teniendo en cuenta que, con el “no” anunciado de PP y Ciudadanos, el apoyo del PDeCAT es imprescindible, en el Gobierno temen que las dudas de los convergentes provoquen que otros partidos, como PNV, ERC e incluso Podemos, se bajen del acuerdo en los próximos días, lo que ya haría imposible cualquier conversación con los de Bonvehí.

Sánchez y Montero toman el mando

Consciente de ese riesgo, y con el objetivo de evitar la “marcha atrás” del PDeCAT y el “efecto contagio” en los demás socios, Pedro Sánchez ha decidido ponerse al mando de las negociaciones con los nacionalistas catalanes.

Fuentes de la dirección del Grupo Socialista en el Congreso confirman a ECD que, hasta este lunes, la portavoz parlamentaria, Adriana Lastra, y Rafael Simancas, secretario general, llevaban las conversaciones con el resto de partidos. Tanto para el techo de gasto como, por ejemplo, para la reforma de RTVE.

Ante la falta de apoyos para sacar adelante el techo de gasto, “Sánchez y la ministra María Jesús Montero han tomado las riendas”. Un cambio de estrategia que deja a las claras “cuál es la máxima prioridad del Gobierno a día de hoy”.

Desde Moncloa muestran sus reservas sobre cómo pueden acabar las negociaciones, aunque aún conservan las esperanzas, después de que los convergentes hayan confirmado su apoyo al nombramiento de Rosa María Mateo como administradora de RTVE. Ese “sí” puede ser un primer paso de cara a la decisiva votación del viernes.

“El viernes nos jugamos el Gobierno”

Las mismas fuentes, no obstante, admiten que “aún hay mucho que hablar” en los próximos tres días, porque “ahora nadie puede pronosticar qué va a votar cada partido”, en el Pleno “más decisivo” de la legislatura.

El propio Pedro Sánchez ha transmitido a su equipo en La Moncloa, y a los altos cargos del partido en Ferraz, que “el viernes nos jugamos el Gobierno”, dejando así clara la trascendencia de una votación que, en su opinión, decidirá el futuro del Ejecutivo en los próximos meses.

Personas que tienen contacto directo con Presidencia explican que, de no salir adelante el techo de gasto el viernes, “nos quedaríamos en una situación muy comprometida”, ya que “tampoco tendríamos Presupuestos. Y, de seguir adelante, deberíamos ‘comernos’ un año más los presentados por el PP”.

Debate sobre un adelanto electoral

Los cargos del Gobierno y del PSOE consultados prefieren no hacer cábalas sobre un posible adelanto electoral, de no lograr los apoyos necesarios para la aprobación del techo de gasto.

Pese a ello, recuerdan que “para nosotros no es ninguna sorpresa que esto iba a ser complicado de gestionar. Y tampoco podemos rendirnos ante la primera dificultad”. Aunque añaden: “No se puede gobernar con unos Presupuestos secuestrados y, por tanto, sin aplicar las políticas sociales y económicas que habíamos anunciado”.

En Ferraz no contemplan “elecciones inmediatas”, pero admiten que, de no salir el techo de gasto, “habrá que estudiar y debatir todos los escenarios, teniendo siempre la última palabra el presidente”.

En este sentido, en la sede nacional ya se habla de una reunión de la ejecutiva de Sánchez a finales de agosto o en los primeros días de septiembre para analizar la situación y contemplar diferentes alternativas a un posible bloqueo del techo de gasto y de los Presupuestos.

 
 
 
 
 
FUENTE: ELCONFIDENCIALDIGITAL