La manifestación del Orgullo Gay arrancó pasadas las 17.30 horas desde la madrileña Glorieta de Atocha bajo el lema «Conquistando la igualdad, TRANSformando la sociedad», en referencia a la reivindicación principal de este año: los derechos de las personas transexuales. Una pancarta que portaban la presidenta de la Federación Estatal de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales (Felgtb), Uge Sangil y el presidente del colectivo LGTB de Madrid (Cogam), Jesús Grande, junto con representantes de partidos políticos, excepto el PP, y sindicatos. Según los datos cuantificados por la Policía Nacional y la Delegación del Gobierno a la marcha acudieron alrededor de 700.000 personas.

Por primera vez, en la cabecera de la manifestación marcharon dos ministros: el de Interior, Fernando Grande-Marlaska, y la de Sanidad, Carmen Montón. Esta última afirmó que con la entrada al Gobierno de Pedro Sánchez «se abre un nuevo tiempo de ampliación, consolidación y recuperación» de los derechos del colectivo LGTBI. No obstante, la titular de Santidad admitió que tendrán que poner «toda la carne en el asador» para consolidar los 40 años de reivindicación y «los muchos logros conseguidos». «El movimiento LGTBI nos tiene a su lado como Gobierno y como ciudadanos y ciudadanas», dijo.

Por su parte, el ministro Grande-Marlaska destacó al inicio de la marcha que, a pesar de que España es un país «privilegiado» en avances para el colectivo LGTBI, todavía queda «mucho camino por recorrer», porque «hay gente que aún lo pasa realmente mal». En declaraciones a los periodistas, el titular de Interior defendió su presencia en la manifestación porque «todavía hay mucho camino por recorrer, todavía hay gente que lo pasa realmente mal y necesita apoyo».

Y se refirió expresamente a las personas transexuales, que este año marcan las reivindicaciones, porque los derechos de este colectivo se vulneran «especialmente» y, por eso, «hay que estar vigilantes». «Hay una asignatura pendiente con ellos», reiteró Marlaska, antes de subrayar que queda mucho por hacer en ámbitos como el laboral o el educativo.

Junto a ellos, participaron también la vicesecretaria general del PSOE, Adriana Lastra; el líder de Ciudadanos, Albert Rivera; la diputada Sofía Castañón, secretaria de Igualdad y Feminismos de Podemos, y los secretarios generales de CCOO y UGT, Unai Sordo y Pepe Álvarez, entre otros.

El líder de Ciudadanos (Cs), Albert Rivera, celebró que España es uno de los países «más avanzados, liberales y modernos del mundo», si bien, añadió que todavía hay que seguir luchando contra la homofobia y la discriminación. «Eso es un orgullo, valga la redundancia, pero hay que pelearlo cada día, hay que luchar por las libertades cada día», dijo a los medios de comunicación en la cabecera de la marcha, junto a otros representantes políticos.

Rivera recalcó que había acudido a la marcha para apoyar «al colectivo LGTBI, la libertad, la igualdad y la diversidad» y se mostró orgulloso de estar defendiéndolo «cuarenta años después de que empezara todo esto». «Pero todavía hay gente discriminada, hay homofobia y hay gente que no puede formar su tipo de familia como deseen», indicó, para después añadir que «hay que pelear esa ley de la gestación subrogada y hay que sacar del Parlamento esa ley contra la discriminación y por la igualdad».

Entre uno y dos millones de personas se espera que participen en el acto central de las fiestas del Orgullo LGTBIQ+, manifestación y el desfile de 47 carrozas que recorren las calles de Madrid, vigilado por unos mil policías. La marcha, convocada por el Colectivo de Lesbianas, Gais, Transexuales y Bisexuales de Madrid (Cogam) y la Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Transexuales y Bisexuales (Felgtb), ha partido a las 17:30 horas desde Atocha hasta Colón.

Ángel Garrido no ha asistido

El presidente madrileño, Ángel Garrido, ha lamentado el veto que los organizadores del Orgullo han impuesto al PP y a su Gobierno para participar en los actos centrales de esta fiesta, porque «supone levantar barreras en una manifestación que pretende derribarlas» y porque «representa la incongruencia de inclinarse por la exclusión en un evento inclusivo».

Un veto, dice Garrido en un artículo publicado en el diario ‘El Mundo’, que «viene a estigmatizar a un partido que en la Comunidad de Madrid está trabajando como el que más en favor del colectivo LGTBI, del que también forman parte políticos, militantes y simpatizantes del PP».

A la manifestación sí ha asistido una representación del Gobierno de la Comunidad de Madrid: el consejero de Cultura, Turismo y deportes, Jaime de los Santos. «Lo importante es que hemos estado, da igual estar un poco por detrás y lo importante es que los 365 días del luchemos por implementar las leyes aprobadas hace dos años y por los derechos del colectivo LGTBI», ha remarcado durante la marcha.

Garrido recuerda que el compromiso de esta comunidad con el colectivo LGTBI se ha traducido en «realizaciones concretas», y como muestra cita las dos leyes contra la discriminación y sobre la transexualidad, el protocolo de atención a víctimas, la inclusión de la realidad de este colectivo en los planes de estudio, la subvención a entidades especializadas, el apoyo a la diversidad familiar o la lucha contra el acoso escolar que pueden sufrir los alumnos LGTBI.

Gabilondo justifica el veto al PP

El portavoz del PSOE-M en la Asamblea de Madrid, Ángel Gabilondo, ha recalcado hoy que la «no invitación» al PP a la manifestación del Orgullo se debe a que «incumplen su palabra» al no ejecutar las leyes específicas para el colectivo, por lo que «no pueden liderar un proceso de lo que no son cumplidores».

En declaraciones a los medios en la cabecera de la marcha, junto a la diputada regional en el Parlamento madrileño Carla Antonelli, Gabilondo ha subrayado que «nadie» ha prohibido al PP que acuda a los actos centrales del día del Orgullo LGTBIQ+, en un «espacio abierto», sino que los organizadores han considerado que «no es consecuente» que estén liderando la pancarta. «No basta» con aprobar las normas, sino que deben cumplirse y ejecutarse. «Espero y deseo que se ejecuten y cumplan en todos sus puntos», ha dicho Gabilondo, que ha señalado que no pueden aprobarse solo «los puntos que le gustan al PP», sino «todos» sus apartados.

Para Gabilondo sigue siendo necesario defender los derechos de las personas que «tienen dificultades para expresarse» en contextos «que no son adecuados», como por ejemplo en los centros educativos. Por su parte, Antonelli ha explicado que la oposición en la Cámara regional presentó 247 enmiendas a la ley contra la LGTBIfobia, lo que, en su opinión, es un reflejo de que el PP «se niega a cumplir».

Villacís respeta la decisión de las asociaciones

La portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Madrid, Begoña Villacís,ha afirmado que respeta la decisión de las asociaciones LGTBI de no invitar a la cabecera de la manifestación del Orgullo al presidente de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, aunque le gustaría que en la marcha pudieran estar «todos». En declaraciones a los medios de comunicación durante la manifestación, Villacís ha indicado que esa decisión de las asociaciones es seguramente su «manera de reivindicar» que se cumplan las leyes para el colectivo, si bien a ella le gustaría que pudieran estar todos en el evento y «celebrar» este día.

 
Por otro lado, ha comentado que el Orgullo LGTBI es un evento para «celebrar» pero también recordar que el camino para lograr derechos al colectivo «no ha sido fácil». «Pero Madrid se ha ido llenando de libertad y eso es maravilloso», ha asegurado para añadir que las libertades hay que «mimarlas y cuidarlas» dado que aún se producen episodios de «intolerancia».

 
Finalmente, la portavoz municipal de la formación naranja ha dicho que se tienen que aprovechar «las calles libres de Madrid para extenderlas a otros países».

 
 
 
 
 
 
FUENTE: ELCONFIDENCIAL