El empuje de Pedro Sánchez ha teñido el mapa español de rojo. Si en 2016 el PP era la fuerza dominante en la mayoría de circunscripciones -provincias-, hoy lo es el PSOE. Los socialistas han sido el partido más votado en 40 de las 50 provincias en estas elecciones generales. Incluso en Barcelona, donde han recuperado sus buenos resultados de antaño.

Sólo Euskadi, donde PP, Ciudadanos y Vox no han obtenido representación, y Catalunya han resistido al embate de Sánchez. El PNV se ha consagrado como el ganador absoluto de la noche en las tres provincias y ha conseguido un escaño más y ERC se ha hecho con tres de las cuatro provincias catalanas.

En Galicia, A Coruña y Pontevedra son socialistas. Lugo y Ourense permanecen en manos del PP, como Salamanca y Ávila, en Castilla y León. Los populares vencieron en 42 provincias en la repetición de los comicios en 2016 en el anterior ciclo electoral. En la España post 28-A sólo cuentan con cuatro. Lo achacan a la fragmentación del voto en su espectro, que tradicionalmente votaba muy cohesionado. La suma de PP, Ciudadanos y Vox en votos supera a la de PSOE y Unidas Podemos en algunas circunscripciones, pero en escaños la alianza de Colón no llega a los 150 asientos del Congreso de los Diputados mientras que los socios de la moción suman 165 escaños. Contando a En Comú Podem junto a PSOE y Unidas Podemos, la izquierda rebasa en más de 40.000 votos a las derechas.

En Navarra, ha ganado la coalición de PP, Ciudadanos y UPN, Navarra Suma, pero el PSOE ha empatado en escaños.

Unidas Podemos ha perdido los cinco triunfos que lucía hace tres años, cuando se impuso en Euskadi y en las circunscripciones de Barcelona y Tarragona. También habían sido la fuerza más votada en Catalunya. Pero Esquerra Republicana les ha desbancado con un resultado histórico. La papeleta republicana ha sido la más elegida en Girona, Tarragona y Lleida esta vez.

A nivel municipal se observa como el PSOE también ha sido el partido ganador, aunque el PP conserva importantes graneros de votos en Castilla y León, La Rioja y Galicia, sobre todo, en áreas de Castilla-La Mancha y en la zona de Madrid, o Valencia.

En Euskadi los nacionalistas vascos del PNV y EH Bildu -en la zona de Guipúzcoa- son hegemónicos y en Catalunya lo ha sido el independentismo, sobre todo ERC, con algunas excepciones donde se ha impuesto el proyecto de Carles Puigdemont. Andalucía se mantiene como feudo socialista, igual que Aragón o Extremadura.

Resultados 2019

El Ejido se refuerza como bastión de Vox después de ser en las pasadas elecciones andaluzas el municipio donde más porcentaje de voto obtuvo.

En 2016, el mapa por municipios era azul también. Sólo Euskadi y Catalunya y algunas zonas de Andalucía deshecharon la papeleta popular en detrimento de Podemos o del PSOE o de partidos regionales.