Con la segunda votación de investidura fijada a partir de las dos y media de hoy, el PSOE y Podemos no habían cerrado a última hora de la noche de ayer un acuerdo para formar un Gobierno de coalición. Los socialistas ampliaron su oferta a los de Pablo Iglesias, pero esto la consideraron insuficiente.
La negociación, tal y como anunció Ferraz a primera hora de la tarde de ayer, se dio por finalizada por el PSOE tras presentar Carmen Calvo una última propuesta a Pablo Echenique. Desde la formación morada se trasladó que era “insuficiente”, y exigieron aún más peso en el futuro gobierno.
Pues bien. Según ha podido saber Confidencial Digital, Unidas Podemos no solo trató de presionar a Sánchez exigiendo un mayor número de ministerios a cambio de apoyar la investidura. También quiso doblar la voluntad del presidente en funciones amenazándole con las consecuencias que tendría un fracaso de la investidura.
“Sacaremos a la gente a la calle”
En concreto, una de las advertencias que más han sorprendido a Pedro Sánchez y su equipo negociador es la organización, por parte de Podemos, de manifestaciones y movilizaciones contra el PSOE por haber frustrado con sus prohibiciones la formación de un Gobierno progresista de izquierda en España.
Así lo reveló un dirigente de la coalición a finales de semana, en una reunión en la que compartió con otros altos cargos confidencias sobre cómo estaba discurriendo la negociación con los socialistas. En un momento dado, afirmó:
–“Les hemos dicho que, si no aceptan nuestras condiciones y no hay Gobierno, sacaremos a miles de personas a la calle“.
Este mismo dirigente, que concurrió en los primeros puestos de la lista de Unidas Podemos por Madrid liderada Pablo Iglesias, añadió: “Va a ser tal la indignación si no hay gobierno, que la movilización va a ser casi espontánea”.
Recuperar el espíritu del 15-M
La tesis de este dirigente de Unidas Podemos, y de los colaboradores más próximos a Pablo Iglesias, es que, con las trabas puestas por el PSOE a un Gobierno de coalición, los votantes de izquierdas se volverán a sentir engañados con los socialistas, y se producirá un nuevo movimiento de ruptura.
Desde la coalición formada por Podemos e IU se añade, en este sentido, que ese “desengaño” e “indignación” ya se dio hace ocho años, cuando, en mayo de 2011, miles de personas tomaron la Puerta del Sol de Madrid.
Ahí empezó el movimiento 15-M que, tal y como han advertido al equipo de Pedro Sánchez, puede “resucitar” si el PSOE se niega a formar “una coalición de verdad”.
Miedo en Ferraz a quedar como culpables
Esta advertencia de Unidas Podemos, junto con los últimos movimientos de Pablo Iglesias, como la renuncia a ser ministro y el discurso en el Congreso enumerando todos los vetos de Pedro Sánchez, hicieron mella tanto en el PSOE como en Moncloa.
Tal y como se informó ayer en estas páginas, el presidente decidió el martes multiplicar esfuerzos para llegar a un acuerdo con Podemos, porque entendió que, de ir a nuevas elecciones, él quedaría como culpable.
Además, en Ferraz se teme que, con manifestaciones y movilizaciones callejeras, Pablo Iglesias consiga colgarse el papel de víctima y señalar al PSOE como el responsable de la repetición electoral.
Se recuerda, en este sentido, que en 2011, en plena ebullición del 15-M, los socialistas se dejaron millones de votantes por el camino.
Ahora, añaden desde el PSOE, la situación es diferente, y el partido podría volver a ser el más votado en una repetición electoral, pero “estaríamos peor que ahora”.
