Ciudadanos es, una vez más, la llave de gobierno después de unas elecciones. En esta ocasión, en Andalucía. Sin embargo, ahora los de Albert Rivera aspiran a presidir ese gobierno, pese a haber sido la tercera fuerza más votada. Una reivindicación que, sin embargo, oculta una hoja de ruta para no enfadar a sus socios europeos.

Según explican al Confidencial Digital altos cargos de C’s, a Rivera le preocupa muchísimo el desgaste que puede sufrir su partido si, finalmente, acaba llegando a cualquier tipo de acuerdo con Vox. Un entendimiento que, de hecho, el propio presidente del partido no descartó del todo el pasado miércoles, al afirmar que sería “irresponsable” cerrarse a cualquier a escenario.

Esas declaraciones se produjeron después de que Rivera fuese advertido por Guy Verhofstadt, el líder del grupo de los liberales (ALDE) en el Parlamento Europeo, al que pertenece C’s, del riesgo que supone el «éxito» de la extrema derecha en las elecciones en Andalucía. Un toque de atención que el diario Le Monde también dio el miércoles a Ciudadanos y al PP.

Por ello, y siendo consciente de que existe una posibilidad real de pactar con Vox, Albert Rivera ha diseñado ya una hoja de ruta, en la que propondrá diferentes escenarios previos antes de verse obligado a un acuerdo con los de Abascal.

De esa forma, si finalmente el pacto se produce, podrá explicar que será «por culpa de los demás y no de Ciudadanos”. Un argumento que, al menos sobre el papel, permitiría a Ciudadanos “no enfadar” a sus socios europeos de ALDE.

La “patata caliente” para PP y PSOE

La primera propuesta que ha planteado Ciudadanos tras las elecciones andaluzas del pasado domingo es hacer presidente a Juan Marín con los votos a favor de PP y PSOE. De este modo, afirman en la formación naranja, “se garantiza una nueva etapa centrista en la Junta”. Y, además, “se aglutina todo el voto constitucionalista”.

La idea, sin embargo, ha recibido el rechazo unánime de populares como de socialistas. Susana Díaz insiste que debe ser ella la candidata a la Junta, por haber encabezado la lista más votada, mientras que Juanma Moreno sostiene que él debe liderar una alternativa al PSOE, porque ha quedado segundo en esos comicios.

Gobierno de coalición el PP

Con el “no” casi seguro a esta primera oferta, Ciudadanos cambiará de discurso en las próximas semanas, para abrirse a formar un gobierno de coalición con el PP.

Los de Rivera, con el fin de evitarse el apoyo de Vox, pedirán la abstención de los 33 diputados del PSOE. Una salida que sería suficiente para garantizar la investidura de Juanma Moreno.

En la formación naranja no ven imposible esa fórmula. Entre otras cosas, porque la propia Susana Díaz ha insistido, desde el pasado domingo, en que el próximo gobierno de la Junta no tiene que depender de Vox. Además, empresarios del IBEX han pedido a la todavía presidenta de la Junta que se abstenga para facilitar un gobierno PP- C’s.

Vox, fuera de la Junta

Desde Ciudadanos insisten en que, si esta segunda oferta también fracasa, “entonces y solo entonces” el partido se abrirá a hablar con Voxy a buscar su apoyo en la investidura.

No obstante, advierten las fuentes consultadas, la formación naranja se negará absolutamente a que los de Abascal entren en la Junta, algo que, por el contrario, no han descartado ni Pablo Casado ni Juanma Morenoa lo largo de la última semana.

Desde el entorno de Rivera afirman que, si Ciudadanos ofrece dos alternativas previas a un acuerdo con Vox, y al final logra que ese partido no entre en el gobierno regional, nadie podrá echarles nada en cara: ni los socios de ALDE, ni el electorado de cara a las municipales y autonómicas de mayo.
 
 

FUENTE: ELCONFIDENCIALDIGITAL